sábado, 25 de abril de 2015

DIOS: ESCUDO ES A TODOS LOS QUE EN ÉL ESPERAN


En II de Samuel capítulo 22 encontramos el cantico de liberación de David, 51 versículos de una poética exquisita dedicada a Dios luego de un periodo de guerra contra los enemigos de Israel, vamos a centrarnos en lo contenido entre el 29 al 35:
Tú eres mi lámpara, oh Jehová;
Mi Dios alumbrará mis tinieblas.
Contigo desbarataré ejércitos,
Y con mi Dios asaltaré muros.
En cuanto a Dios, perfecto es su camino,
Y acrisolada la palabra de Jehová.
Escudo es a todos los que en él esperan.
Porque ¿quién es Dios, sino sólo Jehová?
¿Y qué roca hay fuera de nuestro Dios?
Dios es el que me ciñe de fuerza,
Y quien despeja mi camino;
Quien hace mis pies como de ciervas,
Y me hace estar firme sobre mis alturas;
Quien adiestra mis manos para la batalla,
De manera que se doble el arco de bronce con mis brazos.

De este extracto del cantico de David podemos concluir lo siguiente:

Dios es la luz que nos alumbra

David compara al Señor con una lámpara que rompe con la oscuridad y le da claridad; esa misma luz es la que ilumina nuestro andar, confirmemos esta verdad con otros pasajes de la Palabra de Dios.

Salmo 27:1:
Jehová es mi luz y mi salvación; ¿de quién temeré?
Jehová es la fortaleza de mi vida; ¿de quién he de atemorizarme?”

Juan 8:12
“Otra vez Jesús les habló, diciendo: Yo soy la luz del mundo; el que me sigue, no andará en tinieblas, sino que tendrá la luz de la vida.

I de Juan 1:5
“Este es el mensaje que hemos oído de él, y os anunciamos: Dios es luz, y no hay ningunas tinieblas en él.”

Dios nos da la fuerza

David reconoce que su capacidad de combate proviene del Señor y fue la que le permitió cumplir su exitosa campaña militar para conquistar los territorios enemigos y establecer el reino de Israel; ese mismo poder es el que nos fortalece para trabajar para la obra de Dios, corroboremos esta verdad con otros pasajes de la Biblia.

Éxodo 15:2:
Jehová es mi fortaleza y mi cántico,
Y ha sido mi salvación.
Este es mi Dios, y lo alabaré;”
Salmo 28:8
Jehová es la fortaleza de su pueblo,
Y el refugio salvador de su ungido.”

Salmo 46:1
Dios es nuestro amparo y fortaleza,
Nuestro pronto auxilio en las tribulaciones.”

Salmo 73:26
Mi carne y mi corazón desfallecen;
Más la roca de mi corazón y mi porción es Dios para siempre.”

Salmos 81:1
Cantad con gozo a Dios, fortaleza nuestra;
Al Dios de Jacob aclamad con júbilo.”

Salmos 84:5
Bienaventurado el hombre que tiene en ti sus fuerzas,
En cuyo corazón están tus caminos.”

Dios es nuestro escudo

Génesis 15:1
“Después de estas cosas vino la palabra de Jehová a Abram en visión, diciendo: No temas, Abram; yo soy tu escudo, y tu galardón será sobremanera grande.”

Deuteronomio 33:29:
“Bienaventurado tú, oh Israel.
¿Quién como tú,
Pueblo salvo por Jehová,
Escudo de tu socorro,
Y espada de tu triunfo?
Así que tus enemigos serán humillados,
Y tú hollarás sobre sus alturas.”

Salmos 33:20
“Nuestra alma espera a Jehová;
Nuestra ayuda y nuestro escudo es él.”

Salmos 84:11
Porque sol y escudo es Jehová Dios;
Gracia y gloria dará Jehová.”

Salmos 115:9
“Oh Israel, confía en Jehová;
Él es tu ayuda y tu escudo.”

Proverbios 30:15
“Toda palabra de Dios es limpia;
Él es escudo a los que en él esperan.”


Jóvenes, hagamos nuestro el cantico de David a Dios, la guerra por las almas de los hombres la peleamos de la mano del Señor, permitamos que nos alumbre con su luz, nos aliente con su poder y nos proteja y así salir victoriosos y llevar mucho fruto espiritual para Él.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Dios, nuestro escudo. =)