viernes, 28 de junio de 2019

AMAR A LOS ENEMIGOS


Si no sabemos cómo actuar con nuestros enemigos, pues Dios nos lo recuerda hoy con MUCHA CLARIDAD. Seguro que da muy buenos resultados. Veámoslo:

27Pero a vosotros los que oís, os digo: Amad a vuestros enemigos, haced bien a los que os aborrecen; 28bendecid a los que os maldicen, y orad por los que os calumnian. 29Al que te hiera en una mejilla, preséntale también la otra; y al que te quite la capa, ni aun la túnica le niegues. 30A cualquiera que te pida, dale; y al que tome lo que es tuyo, no pidas que te lo devuelva. 31Y como queréis que hagan los hombres con vosotros, así también haced vosotros con ellos. 32Porque si amáis a los que os aman, ¿qué mérito tenéis? Porque también los pecadores aman a los que los aman. 33Y si hacéis bien a los que os hacen bien, ¿qué mérito tenéis? Porque también los pecadores hacen lo mismo. 34Y si prestáis a aquellos de quienes esperáis recibir, ¿qué mérito tenéis? Porque también los pecadores prestan a los pecadores, para recibir otro tanto. 35Amad, pues, a vuestros enemigos, y haced bien, y prestad, no esperando de ello nada; y será vuestro galardón grande, y seréis hijos del Altísimo; porque él es benigno para con los ingratos y malos. sSed, pues, misericordiosos, como también vuestro Padre es misericordioso. - Lucas 6:27-36

Dios nos enseña en este pasaje la necesidad de marcar una diferencia con los impíos. Debemos amar a nuestros enemigos si es que los tenemos, debemos hacer el bien a los que nos aborrecen, es necesario bendecir a los que nos maldicen y orar por los que nos calumnian,

Si alguien nos ofende o nos maltrata, debemos responder con humildad dejándole libertad para que vuelva a hacerlo. Si nos quitan algo, no debemos enfadarnos, sino aún dar más de lo que nos quitaron. Dios nos pide que demos a quien nos pida y que si alguien toma algo nuestro, no lo reclamemos.

En fin, Dios nos muestra en este pasaje lo que es el verdadero cristianismo, lo que es ser CRISTOS CHIQUITOS, y la verdad es que no es nada fácil, ya que parecen cosas casi imposibles, pero si Dios nos las pide, es porque ASÍ debe ser. Nuestras actitudes hacia los demás deben ser basadas en el ejemplo de nuestro Señor Jesucristo, pensando siempre en hacer el bien a los demás, analizando y sopesando cada actitud a la luz de la Palabra de Dios.

Jamás debe ocurrírsenos hacer algo a otra persona que no nos gustaría que nos hicieran a nosotros. Así que nada de responder mal, nada de venganzas, nada de chismes, nada de dañar la imagen de otro, nada de miradas maliciosas, nada de comportamientos que vayan contra los mandamientos de Dios. Todo lo que Dios me permita hacer debe ser sin esperar nada a cambio. Debemos ser misericordiosos como también nuestro Padre es misericordioso. Debemos borrar de nuestra mente y de nuestro corazón todo resentimiento contra aquellos que nos han atacado y han tratado de hacernos mal. Debemos ORAR por ellos.

Cuantas RECOMENDACIONES bien, pero BIEN IMPORTANTES:
  • Cambiar radicalmente nuestra actitud hacia los que nos han hecho daño, debemos amarlos y orar por ellos
  • Amar a nuestros enemigos
  • Hacer bien a los que nos aborrecen
  • Bendecir a los que nos maldicen
  • Orar por los que nos calumnian
  • Si nos dan en una mejilla, poner la otra
  • No negarnos a que nos quiten cosa alguna
  • Darle al que pida
  • No pedir que nos devuelvan lo que hemos prestado
  • Actuar con los demás, cómo quisiera que ellos actuaran conmigo
  • Responder bien por mal
  • Ser mansos y humildes, soportando todas las ofensas, sin pensar en venganzas
  • Cuidar la lengua y las miradas, no decir nada que cause daño a los demás.
  • Ser misericordiosos con los demás así como Dios ha sido misericordiosos con nosotros.


Tremenda enseñanza: El comportamiento con los enemigos y opositores

1. Si nos hacen mal debemos devolver con bien (Vs 27-30)
2. No hacer con otros lo que no queremos que hagan con nosotros (Vs 31-34)
3. Amar a mis enemigos siendo misericordioso con ellos  (Vs 35-36)

Dios nos recuerda hoy cual debe ser nuestro verdadero comportamiento como Cristianos. Nos lo recuerda un Dios SABIO que me aconseja con mucha precisión cómo seguir el ejemplo de mi Amado Jesús

Es uno de los pasajes más impactantes para el verdadero creyente, ver la claridad con que Dios nos muestra las situaciones que vivimos diariamente y la forma como debemos enfrentarlas

Es un pasaje para vivir YA MISMO, cumpliendo fielmente con cada uno de estos mandamientos TAN PRECISOS, especialmente amando a aquellos que nos hacen daño y orando fervientemente por ellos, pero haciéndolo de corazón.

Que se VEA.

Fabio