viernes, 9 de agosto de 2019

CONDENACIÓN Y JUSTIFICACIÓN



Dios a través de Pablo ha puesto en el libro de Romanos un pasaje bien impactante que nos recuerda la grandeza de la misericordia y el amor de Dios por los pecadores. Veamos:
            
18Así que, como por la transgresión de uno vino la condenación a todos los hombres, de la misma manera por la justicia de uno vino a         todos los hombres la justificación de vida. 19Porque así como por la desobediencia de un hombre los muchos fueron constituidos pecadores, así también por la obediencia de uno, los muchos serán constituidos justos. 20Pero la ley se introdujo para que el pecado abundase; mas cuando el pecado abundó, sobreabundó la gracia; 21para que así como el pecado reinó para muerte, así también la gracia reine por la justicia para vida eterna mediante Jesucristo, Señor nuestro. - Romanos 5:18-21

Dios es muy sabio, amoroso y misericordioso, y es así como después de la caída del hombre por el pecado de Adán, ha provisto al hombre la posibilidad de arrepentirse, con el ánimo de perdonarlo.

Dios llegó hasta el punto culminante de su amor, haciéndose hombre en la persona de Jesucristo, a fin de venir a pagar por los pecados de toda la humanidad.

Antes de existir la ley, aunque existía el pecado, no se inculpaba de pecado, pero una vez introducida la ley, el pecado abundó grandemente, el hombre desobedeció y sigue desobedeciendo a todos los mandamientos de Dios, pasándolos por alto y haciendo todo lo contrario a lo establecido por Dios.

Lo admirable, es que cuando el pecado abundó en el mundo SOBREABUNDO la gracia de Dios para salvación por medio de nuestro Señor Jesucristo. Por gracia somos salvos por medio de la fe. Es necesario reconocer el pecado, arrepentirnos y confiar plenamente que al confesarlo, Dios nos perdona y nos limpia de toda mancha de maldad.

Es necesario reconocer la Obra de Cristo por nuestro pecado y apropiarnos de ESA Obra, aceptándolo como nuestro Señor y Salvador.
           
Algunas RECOMENDACIONES bien importantes:
  • No desfallecer en la PREDICACIÓN del EVANGELIO, en la SALVACIÓNPOR GRACIA y NO por obras. Muy claro
  • Valorar más y más a Jesucristo y a la gran obra de amor que Dios hizo a través de ÉL.
  • Entender que al introducirse la ley se destapó la olla podrida del pecado
  • Apreciar el gran Amor y la misericordia de Dios, quién a pesar del pecado del mundo, por su pura gracia nos ofrece salvación
  • Ser conscientes de que solamente podemos apropiarnos de esa gracia a través de reconocer la Obra de Cristo en la cruz


CONDENACIÓN y JUSTIFICACIÓN

1. Por Adán vino el pecado y la CONDENACIÓN, por Jesús vino la JUSTIFICACIÓN para SALVACIÓN  (Vs 18)
2. Por Adán vino la desobediencia y el PECADO, por la OBEDIENCIA de Jesús vino la JUSTIFICACIÓN (Vs 19)
3. Por la LEY abundó el pecado, por la GRACIA abundó el perdón y la SALVACIÓN (Vs 20-21)

Dios nos recuerda una vez más La GRACIA de Dios para darnos su salvación. Es una enseñanza que viene de un Dios de GRACIA que nos ha dado este privilegio de ser SALVOS a pesar de nuestra gran mediocridad

Es impactante ver la forma como Dios nos muestra los dos extremos, pecado y más pecado, gracia y más gracia
           
Vamos a aplicarlo, Disfrutando plenamente de esa gracia y depositando toda mi confianza en sus manos. Valorando la gran Obra que Cristo ha hecho en miles de millones de personas a través de la historia, y ahora en nosotros al regalarnos la preciosa salvación y la seguridad de la VIDA ETERNA, todo solamente por SU GRACIA. Proclamando esta verdad siempre que sea posible.

Fabio