sábado, 11 de noviembre de 2017

CIELOS ABIERTOS, VISIÓN DE DIOS


Comenzamos el libro de Ezequiel, cuyo nombre significa “Dios fortalece”, obra que se estructura en tres grandes secciones así: la primera, correspondiente a los capítulos 1 al 3, que nos habla de la preparación y el llamamiento de Ezequiel; la segunda, correspondiente a los capítulos 4 al 32, que describe la apostasía de Judá; y la tercera, correspondiente a los capítulos 33 al 48, que predice lo porvenir.

Leamos el versículo de esta entrada correspondiente a esta semana.

Ezequiel 1:1
“Aconteció en el año treinta, en el mes cuarto, a los cinco días del mes, que estando yo en medio de los cautivos junto al río Quebar, los cielos se abrieron, y vi visiones de Dios.”

El pueblo de Dios se encontraba privado de la libertad en tierras de Babilonia, bajo el imperio de Nabucodonosor. El Señor se comunicó con Ezequiel, un sacerdote que ejercía su ministerio en medio de la cautividad, y le mostró su Palabra.

Aquí podemos ver a Dios revelando su visión a Ezequiel y a su pueblo. Ello pasa en la actualidad en medio de la Iglesia, nuestro creador nos habla mediante la Biblia, al abrir ese libro tenemos acceso a los cielos abiertos, a las enseñanzas y el futuro.

Job 42:5
“De oídas te había oído;
Mas ahora mis ojos te ven.”

Tengamos siempre presente ese privilegio.

Mateo 5:8
“Bienaventurados los de limpio corazón, porque ellos verán a Dios.”

Una promesa para Israel que pronto será una realidad y que hoy como Iglesia podemos vivir.

Juan 14:19
“Todavía un poco, y el mundo no me verá más; pero vosotros me veréis; porque yo vivo, vosotros también viviréis.”

Mientras Jesús regresa esa posibilidad de visión se mantiene viva en los creyentes.

Juan 16:13-15
“Pero cuando venga el Espíritu de verdad, él os guiará a toda la verdad; porque no hablará por su propia cuenta, sino que hablará todo lo que oyere, y os hará saber las cosas que habrán de venir. El me glorificará; porque tomará de lo mío, y os lo hará saber. Todo lo que tiene el Padre es mío; por eso dije que tomará de lo mío, y os lo hará saber.”

Esa visión es la demostración del Espíritu Santo operando en nosotros.

Hebreos 11:24-27
“Por la fe Moisés, hecho ya grande, rehusó llamarse hijo de la hija de Faraón, escogiendo antes ser maltratado con el pueblo de Dios, que gozar de los deleites temporales del pecado, teniendo por mayores riquezas el vituperio de Cristo que los tesoros de los egipcios; porque tenía puesta la mirada en el galardón. Por la fe dejó a Egipto, no temiendo la ira del rey; porque se sostuvo como viendo al Invisible.”

Vivamos el ejemplo de Moisés que liberó a si pueblo con los ojos puestos en Dios.

Jóvenes, entendamos el privilegio del que gozamos una vez profesamos nuestra fe en Jesucristo. Hoy en medio de nuestras imperfecciones tenemos la Palabra de Dios, podemos entender sus revelaciones y el futuro. No dejemos de leer la Biblia, acudamos a las enseñanzas de los sábados, las predicas dominicales y participemos del corazón de la Iglesia, el discipulado.

Abrazos cordiales a todos.

. M .

viernes, 10 de noviembre de 2017

La COMPAÑÍA PERMANENTE de DIOS y SU PODER


Lo que Dios hizo con Jesús no tiene precio y para muchos no tiene explicación, pero si Dios lo hizo, es porque ASÍ convenía. Es maravilloso ver el PODER de Cristo para salvarnos y ayudarnos. Meditemos en este hermoso pasaje, nos infunde mucho ánimo. Veamos:

10Porque convenía a aquel por cuya causa son todas las cosas, y por quien todas las cosas subsisten, que habiendo de llevar muchos hijos a la gloria, perfeccionase por aflicciones al autor de la salvación de ellos. 11Porque el que santifica y los que son santificados, de uno son todos; por lo cual no se avergüenza de llamarlos hermanos,
12diciendo: Anunciaré a mis hermanos tu nombre, En medio de la congregación te alabaré.
13Y otra vez: Yo confiaré en él.
Y de nuevo: He aquí, yo y los hijos que Dios me dio.
14Así que, por cuanto los hijos participaron de carne y sangre, él también participó de lo mismo, para destruir por medio de la muerte al que tenía el imperio de la muerte, esto es, al diablo, 15y librar a todos los que por el temor de la muerte estaban durante toda la vida sujetos a servidumbre. 16Porque ciertamente no socorrió a los ángeles, sino que socorrió a la descendencia de Abraham. 17Por lo cual debía ser en todo semejante a sus hermanos, para venir a ser misericordioso y fiel sumo sacerdote en lo que a Dios se refiere, para expiar los pecados del pueblo.18Pues en cuanto él mismo padeció siendo tentado, es poderoso para socorrer a los que son tentados. - Hebreos 2:10-18

Definitivamente vemos que Dios no se equivoca, cada una de sus decisiones son perfectas y únicas. Jesús, es el modelo a seguir, lo que Él sufrió y padeció por nuestra salvación, no tiene comparación, Él todo lo hizo de una manera sumisa y humilde, jamás protestó por lo que tenía que pasar, simplemente suplicó la ayuda del Padre en sus momentos de agonía, pero jamás se escuchó despropósito alguno en ÉL.

Realmente es un modelo de vida para un hijo de Dios. Jesús tuvo victoria sobre el pecado, sobre la muerte, sobre el enemigo, y ÉL nos ha prometido ese mismo poder y autoridad para tener victoria, de manera que no tenemos porque sentirnos derrotados, sean cuales sean las circunstancias adversas que tengamos que vivir. Dios + 1 = Somos mayoría.

Jovencitos, nuestra FE y confianza en ÉL y en sus promesas deben permanecer FIRMES.  Jesús, nuestro hermano mayor, el mismo Dios, se hizo carne, y tomó forma de hombre, se hizo siervo, sin vanagloriarse para nada de su condición de Dios, y vivió una vida como la de cualquier ser humano, expuesto a las mismas necesidades, a los mismos dolores y aún muchísimos más, a las mismas tentaciones y aún mucho más grandes, pero supo sobreponerse a TODAS, para darnos un EJEMPLO de VIDA, un ejemplo de pureza y de Santidad, un ejemplo de FE y de esperanza, un ejemplo de cómo podemos agradar a nuestro PADRE.

Jesús, el mismo Dios, es el EJEMPLO a seguir, ÉL nos mostró no solamente que SI es posible sobreponernos a la tentación, aferrados a la Palabra de Dios, sino que está dispuesto a Socorrernos en esos momentos de debilidad en que somos tentados. 

Es un pasaje TREMENDO, lleno de muchas enseñanzas:
  • Confiar plenamente en la OBRA perfecta de Dios a través de Jesús.
  • Entender que lo que Dios hace, es porque ASÍ conviene
  • Seguir el modelo que tenemos en nuestro amado Jesús.
  • No desfallecer, confiando en que tenemos todo Su poder y Su autoridad para salir victoriosos.
  • Recordar siempre los padecimientos de Jesús y la forma como fue tentado
  • Entender que confiados en ÉL y en Su Palabra, podemos salir victoriosos
  • Recurrir a ÉL en los momentos de dificultad, ÉL está dispuesto a interceder por nosotros y a socorrernos oportunamente
  • Confiar plenamente en la Obra que Cristo hizo en la CRUZ y que sigue haciendo día a día en nuestras vidas.
  • Dar gracias a Dios sinceramente por Su hijo Jesucristo y por el ejemplo de vida que nos dejó.


El libro de Hebreos en este pasaje nos recuerda La COMPAÑÍA PERMANENTE de DIOS

1. Lo que Dios dispuso con nosotros es por SU GRACIA, ÉL lo quiso así, hacernos hermanos con Cristo (Vs 10-13)
2. La Obra de Cristo es indescriptible, todo para arrancarnos de las garras del enemigo  (Vs 14-15)
3. Que obra tan grande y sorprendente, salvarnos y luego restituirnos, por Su Gracia (Vs 16-18)

Dios nos ha recordado hoy El PODER de Cristo para SALVARNOS y ayudarnos. Y ese recuerdo viene de un Dios que nos ha dotado de SU PODER a través de su Espíritu Santo, de CRISTO morando en nosotros

A mí, particularmente me ha llamado la atención ver la forma en que Dios nos invita a CONFIAR en el poder que nos ha dado través de Cristo

Estoy convencido de que la mejor forma de aplicar esta enseñanza es confiando plenamente en la presencia y el PODER de CRISTO en nuestras vidas y recurriendo a ÉL para que interceda por nosotros ante el Padre en cualquier situación que tengamos que vivir a fin de que podamos salir victoriosos. ADELANTE, no vamos a desfallecer.


Fabio