OBEDIENCIA TOTAL = MANIFESTACIÓN DE LA GLORIA DE DIOS

Un predicador decía alguna ves que Dios no es incondicional, al principio me costó entenderlo pero la verdad es así, preguntemonos: ¿Cómo esperamos que Dios sea incondicional con nosotros si andamos continuamente en desobediencia? No va a ser así, así no actúa Dios porque él no premia, ni aprueba la desobediencia de parte de nuestra.

Planteo esto porque un hecho asombroso pasó con el pueblo de Israel, a ojos de todo el pueblo y es que vieron la manifestación de la gloria de Dios, es decir, su presencia de una manera sobrenatural y majestuosa a causa de su obediencia en la construcción del tabernáculo de reunión.

Éxodo 39: 42-43 "En conformidad a todas las cosas que Jehová había mandado a Moisés, así hicieron los hijos de Israel toda la obra.

43. Y vio Moisés toda la obra, y he aquí que la habían hecho como Jehová había mandado; y los bendijo. "

Nuestra obediencia Dios la premia con su presencia incondicional, para que nosotros como sus hijos le sigamos, permanezcamos siempre fieles a él, le obedezcamos en todo en conformidad a sus mandamientos.

Éxodo 40: 34-38 "Entonces una nube cubrió el tabernáculo de reunión, y la gloria de Jehová llenó el tabernáculo.

35. Y no podía Moisés entrar en el tabernáculo de reunión, porque la nube estaba sobre él, y la gloria de Jehová lo llenaba.

36. Y cuando la nube se alzaba del tabernáculo, los hijos de Israel se movían en todas sus jornadas;

37. pero si la nube no se alzaba, no se movían hasta el día en que ella se alzaba.

38. Porque la nube de Jehová estaba de día sobre el tabernáculo, y el fuego estaba de noche sobre él, a vista de toda la casa de Israel, en todas sus jornadas."

Una obediencia total es igual a la manifestación de la gloria de Dios que lo llena todo, y nosotros como tabernáculo de Dios y templo de Dios, nos llenamos de él, él es suficiente, no hay lugar a la duda, a volver atras.

Entendiendo esto me duele mi desobediencia y a Dios aún más porque él quiere manifestarse en nuestra vida y por lo tanto debemos tener un ánimo firrme como lo aprendimos el domingo y no desmayar.

Las personas que nos rodean que no conocen de Jesús necesitan verlo por medio de nuestras vidas, una obediencia que produce gloria, fruto para Dios.

Un abrazo.