Ese
mensaje lo podemos adaptar a nuestras vidas así:
Dios conoce nuestras obras
El
Señor conoce perfectamente nuestro obrar, el trabajo, dedicación, sacrificio
continuo y servicio por amor de su nombre y poniendo todo nuestro empeño en
ello y nos invita a seguir adelante sin desfallecer. Recordemos algunos pasajes
que hablan sobre ese arduo trabajo:
Josúe 1:9: “Mira que te mando
que te esfuerces y seas valiente; no
temas ni desmayes, porque Jehová tu Dios estará contigo en dondequiera que
vayas.”
I de Crónicas 28:20:
“Dijo además David a Salomón su hijo: Anímate y esfuérzate, y manos a la obra; no temas, ni desmayes,
porque Jehová Dios, mi Dios, estará contigo; él no te dejará ni te desamparará,
hasta que acabes toda la obra para el servicio de la casa de Jehová.”
I de Corintios 15:58: “Así
que, hermanos míos amados, estad firmes
y constantes, creciendo en la obra del Señor siempre, sabiendo que vuestro
trabajo en el Señor no es en vano.”
Dejar el primer amor
Dios
en su extrema sabiduría pronostica que podemos dejar el primer amor que
sentimos cuando fuimos salvos, podemos caer en la rutina y la costumbre en las
actividades que realizamos y aún en dejar de practicar la lectura de la Biblia.
Arrepentimiento
El
Señor nos invita a recordar el primer estado de enamoramiento y nos pide que
nos arrepintamos del desamor y volvamos a esa primera etapa, viene a mi mente I
de Juan 1:9: “Si confesamos nuestros pecados, él es fiel y justo para perdonar
nuestros pecados, y limpiarnos de toda maldad.”, un buen abrebocas para hacer
una oración honesta y regresar a Dios.
La recompensa
Finalmente
tengamos presente que tenemos una recompensa eterna como nos muestran los
siguientes pasajes:
II de Pedro 3:13: “Pero nosotros esperamos, según sus promesas, cielos nuevos y tierra nueva, en los cuales mora la justicia.”
Juan 14:2: “En la casa de mi Padre muchas
moradas hay; si así no fuera, yo os lo hubiera dicho; voy, pues, a preparar lugar para vosotros.”
Jóvenes
nuestro Señor nos conoce mejor que lo que nosotros mismos pretendamos hacerlo,
es factible que dejemos el primer amor, para lo cual el único camino es hacer
cuentas con Él y retomar el verdadero sentido de nuestra fe y servicio teniendo
la mirada puesta en las cosas eternas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario