viernes, 28 de marzo de 2014

El VALOR de los MANDAMIENTOS

Muchas veces pasamos por alto los mandamientos, los tomamos muy deportivamente, sin entender que estamos ignorando a Dios.
 
El salmista se toma una buena parte de la Escritura para hablarnos con claridad del gran valor que tienen los MANDANIENTOS. Veamos :
 
Salmo 119:96-104 - 96 A toda perfección he visto fin; Amplio sobremanera es tu mandamiento. 97 ¡Oh, cuánto amo yo tu ley! Todo el día es ella mi meditación. 98 Me has hecho más sabio que mis enemigos con tus mandamientos, Porque siempre están conmigo. 99 Más que todos mis enseñadores he entendido, Porque tus testimonios son mi meditación. 100 Más que los viejos he entendido, Porque he guardado tus mandamientos; 101 De todo mal camino contuve mis pies, Para guardar tu palabra. 102 No me aparté de tus juicios, Porque tú me enseñaste. 103 ¡Cuán dulces son a mi paladar tus palabras! Más que la miel a mi boca. 104 De tus mandamientos he adquirido inteligencia; Por tanto, he aborrecido todo camino de mentira.
 
El MANDAMIENTO de Jehová es perfecto, su vigencia es eterna, no se trata simplemente de leerlos, sino de MEDITARLOS profundamente, mirando mi vida a la luz de ellos, y buscando en ellos la forma de perfeccionarme, con la ayuda y la GRACIA de Dios.
 
Los mandamientos de Dios  me hacen más sabio que mis enemigos, cuando permanecen en mi mente y en mi corazón. Cuando medito continuamente en ellos, puedo entender aún más que mis enseñadores. Aún puedo llegar a entender mejor que los viejos cuando guardo sus mandamientos.
 
El VALOR de la palabra de Dios, reflejado en sus testimonios, sus estatutos, sus mandamientos, es INFINITO, solamente ella puede LAVAR nuestras vidas, limpiarnos más y más y acercarnos más a la presencia de Dios, conformándonos a la Imagen de Su HIJO Jesucristo.
 
Dios es MUY pero MUY GRANDE, amoroso y misericordioso, nos ha regalado día a día múltiples bendiciones, Dios nos ha mostrado que es un DIOS REAL y que aún en medio de las pruebas y las dificultades, ÉL siempre se manifiesta. Si andamos por el camino correcto, si seguimos sus mandamientos, si nos deleitamos con sus dulces consejos, ÉL nos dará todo lo que necesitamos para ser FELICES y para poderle servir con todo el corazón.
 
El valor de los MANDAMIENTOS es indescriptible. Tenemos Un Dios infinitamente SABIO y misericordioso, que nos ha dejadas escritas las instrucciones PERFECTAS para cada instante de nuestra vida. A mí me impacta saber que tengo en mis manos TODO para ser feliz y PERFECTO, y que por tanto, debo aferrarme más y más a la Palabra de Dios
 
Algo que digo una y otra vez, pero que no siempre practico es que debo SOPESAR cada cosa que vaya a decir, y cada cosa que vaya a hacer, a la LUZ de la Palabra de Dios. Debo dejar la MECANICIDAD en mi vida, ya que ésta, aferrada a la carne, me lleva a cometer muchos errores. Debo analizar cada instante de mi vida y ACTUAR de acuerdo a los pensamientos de DIOS… ¡ Que difícil !!!  
 
A propósito, vemos en este pasaje algunos Mandamientos :
 
Ø  Entender que la Palabra de Dios, sus mandamientos, son lo único que permanece para siempre
Ø  Los mandamientos de Dios tienen APLICACIÓN para TODA circunstancia de nuestra vida, son amplios sobremanera
Ø  Debo AMAR sinceramente Su Palabra y MEDITAR en ella todo el día.
Ø  Si quiero ser realmente más SABIO que cualquiera, sus mandamientos deben estar conmigo
Ø  Puedo llegar a entender aún más que mis enseñadores, meditando en los testimonios de Dios
Ø  Puedo entender más que los viejos guardando sus mandamientos.
Ø  Cuidar nuestras pisadas alejándonos de todo camino de mal.
Ø  Guardar la Palabra de Dios y vivirla intensamente
Ø  No apartarnos de los juicios de Dios y vivir cada una de sus enseñanzas
Ø  Deleitarnos con la dulce Palabra de Dios a cada momento.
Ø  Actuar siempre con base en los pensamientos y deseos de Dios para que lo hagamos inteligentemente
Ø  Aborrecer todo camino de mentira
 
¡¡¡ Llevados de la MANO de DIOS, todo SERÁ POSIBLE !!!

1 comentario:

Anónimo dijo...

¡ Dios mio cuanto te desobedecemos...Grave !