martes, 2 de abril de 2013

MEDITEMOS EN NUESTROS CAMINOS

Dios esta mañana llamó mi atención y me hizo meditar en mis caminos, en las cosas que hago para él, si estoy invirtiendo en la casa del Señor, en ponerla bonita, es tiempo de meditar bien en nuestros caminos.
 
Sobre esto nos habla el profeta Hageo, cuando Israel regresa a su tierra después de su cautiverio a reconstruir el templo y les habla fuerte porque dejaron la obra de la casa de Dios para artesonar sus propias casas y por esto pagaron sus consecuencias y Dios los reprende.
 
Hageo 1: 4-9 "¿Es para vosotros tiempo, para vosotros, de habitar en vuestras casas artesonadas, y esta casa está desierta?
5. Pues así ha dicho Jehová de los ejércitos: Meditad bien sobre vuestros caminos.
6. Sembráis mucho, y recogéis poco; coméis, y no os saciáis; bebéis, y no quedáis satisfechos; os vestís, y no os calentáis; y el que trabaja a jornal recibe su jornal en saco roto.
7. Así ha dicho Jehová de los ejércitos: Meditad sobre vuestros caminos.
8. Subid al monte, y traed madera, y reedificad la casa; y pondré en ella mi voluntad, y seré glorificado, ha dicho Jehová.
9. Buscáis mucho, y halláis poco; y encerráis en casa, y yo lo disiparé en un soplo. ¿Por qué? dice Jehová de los ejércitos. Por cuanto mi casa está desierta, y cada uno de vosotros corre a su propia casa."
 
¿Qué tiene que ver esto con nosotros? creo que mucho tiene que ver con nosotros porque somos templo del Dios viviente y si somos sinceros muchas veces invertimos más en artesonar nuestras propias casas, es decir, nuestra vida, nuestras cosas, nuestras comodidades, pero la casa de Dios está desierta, no hay comunión con Dios, pero me doy el contentillo de que sirvo en la iglesia, de que voy a congregarme los domingos o en las reuniones de jóvenes, pero estar en la mañana en la Biblia, no, discipulado, no, el reino de Dios y su justicia, no, y Dios nos llama la atención hoy para que meditemos bien en nuestros caminos.
 
¿Tenemos fruto en lo que hacemos?, Dios no prosperó en nada a su pueblo y mucho menos lo hará en nosotros si dejamos su casa desierta; Dios da una solución a este problema en el versículo 8 "Subid al monte" que volvamos en comunión con él o como diría Job en amistad con él y reedifiquemos la casa de Dios, pongamos firme el fundamento que es Jesucristo y sobre él edifiquemos nuestra vida, nuestras familias, nuestro servicio, nuestros trabajos, toda nuestra vida.
 
Meditemos en nuestros caminos y hagamos las cosas al derecho teniendo a nuestro Dios como prioridad máxima y él tenga el control del resto de las cosas, seguro sí vamos a tener fruto y Dios va estar con nosotros bendiciéndonos. Hagamos los cambios que tengamos que hacer y edifiquemos sobre la Roca.
 
Un abrazo.

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