jueves, 17 de noviembre de 2011

AL VERLE… SE REGOCIJARON!

“19Cuando llegó la noche de aquel mismo día, el primero de la semana, estando las puertas cerradas en el lugar donde los discípulos estaban reunidos por miedo de los judíos, vino Jesús, y puesto en medio, les dijo: Paz a vosotros. 20Y cuando les hubo dicho esto, les mostró las manos y el costado. Y los discípulos se regocijaron viendo al Señor. 21Entonces Jesús les dijo otra vez: Paz a vosotros. Como me envió el Padre, así también yo os envío” – Juan 20:19-21.

En el pasaje que acabamos de leer, El Señor acaba de resucitar una vez han transcurrido los días de su sepultura.

Juan, Pedro y María Magdalena; ya han notado que la tumba en Jerusalén se encuentra vacía y esta última (María Magdalena) ya ha visto de manera personal al Maestro. Fue tal su impacto que su reacción fue… ¡Raboni! (que traducido es: Maestro).

Seguido a esto, Jesús se aparece a sus discípulos mostrándoles sus manos y su costado; y es acá donde me sorprendió, me enseñó y me animó la reacción de los discípulos.

¿Que hicieron? ¿Qué sintieron? ¿Cómo actuaron? El pasaje lo describe claramente…

Y cuando les hubo dicho esto, les mostró las manos y el costado. Y los discípulos se regocijaron viendo al Señor.

Una cosa sucedió en todos a la misma vez. Se regocijaron viendo a Su Señor. Esta noche te animamos a hacer y a vivir lo mismo que experimentaron los discípulos en Juan 20.

Busca a Jesús, encuéntralo en las páginas de la Biblia, siéntelo en el entorno de tu vida; aprende a caminar con El y disfruta a plenitud del gozo que Dios y solo El pueden dar al corazón nuestro.

Damos gracias a Dios por Jesucristo. Por sus manos y su costado traspasados; y por tanto amor derrochado por todos y cada uno de nosotros.

Un abrazo y nos vemos mañana,

1 comentario:

Diego Julian Pena Ibanez dijo...

Muy Bonito, es importante saber llevar una intima comunion con Dios, entender todo lo que el nos quiere decir a traves de la sagrada escritura y de esta manera aplicarlo a nuestras vidas.