Isaías 29:13-14 “Dice, pues, el Señor: Porque este pueblo se acerca a mí con su boca, y con sus labios me honra, pero su corazón está lejos de mí, y su temor de mí no es más que un mandamiento de hombres que les ha sido enseñado; por tanto, he aquí que nuevamente excitaré yo la admiración de este pueblo con un prodigio grande y espantoso; porque perecerá la sabiduría de sus sabios, y se desvanecerá la inteligencia de sus entendidos”.
Hoy jóvenes quiero que meditemos en ¿qué tan cerca estamos de Dios en nuestro diario vivir? Como cristianos nos damos cuenta en qué tónica va nuestra relación con él. Cuando es una relación como la de Enoc, que caminaba todo el tiempo con Dios, es una relación fuerte, cálida, llena de la Palabra de Dios, de la Oración y es una relación de corazón, verdadera, no solo de labios, sino real y vivencial con el Señor.
Con Dios no se puede ser un cristiano hipócrita, es decir, decimos una cosa y hacemos otra, predicamos una cosa y obramos otra. Debemos ser coherentes, lo que decimos, es bíblico y eso vivimos.
Ahora bien, además lo cerca que estamos de DIOS se evidencia con nuestro temor a la Biblia el cual no debe ser un temor como si la Biblia fuera la palabra de los hombres. Realmente el temor es cuando la recibimos como “La Palabra de Dios”, como la Palabra del Dios soberano, La Palabra que está por encima de cualquier otra palabra o de cualquier otro consejo u opinión o decisión personal, la Palabra del TodoPoderoso, Infinito, lleno de Verdad, el único Dios verdadero. No son mandamientos de hombres, son los mandamientos de Dios.
Dios nos enseña hoy una consecuencia de cuando a Él lo tenemos lejos de nuestro corazón pese a que vive en nosotros (si tenemos a Cristo): “perecerá la sabiduría de sus sabios, y se desvanecerá la inteligencia de sus entendidos”… Más temprano que tarde si nos alejamos de Dios pese a que hablamos de él con la boca, seremos cristianos “torpes”e hipócritas que estamos a la deriva en altamar llevados por el viento y las olas y muy posiblemente naufragando en la vida cirstiana…, cayendo vez tras ves, sin la sabiduría y el consejo de Dios en nuestra vida.
¿Qué tan cerca estás de Dios hoy?
Que tengas un día lleno del Señor!!
1 comentario:
Es un reto a cumplir cada uno de sus mandamientos (los de su palabra) y que nuestras palabras sean de acuerdo a nuestros actos, por amor y temor a Él, mil gracias.
Christian.
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