lunes, 23 de noviembre de 2009

"CADA UNO HACIA LO QUE BIEN LE PARECIA"


La semana pasada tuve la oportunidad de leer el libro de Jueces y Dios me mostraba claramente las consecuencias de relajarnos en nuestra vida espiritual.

(Jueces 2:10) “Y toda aquella generación también fue reunida a sus padres. Y se levantó después de ellos otra generación que no conocía a Jehová, ni la obra que él había hecho por Israel”.

Este versículo es escrito luego de la muerte de Josue y de toda la generación a la que Dios rescato de la esclavitud en el desierto. Y dice el pasaje que esta nueva generación no conocía a Dios, y leyendo los siguientes capítulos es claro que la palabra conocer se refería a que no tenían intima comunión con Dios. Y pensaba, como esto pudo ser por dos razones principales: Primero por que sus papas fueron creyentes mediocres, o segundo, por que se mezclaron como la mayoría de los Israelitas con gente de otros pueblos que adoraban a otros Dioses.

Y con esto Dios nos enseña dos cosas bien importantes: La relación que nuestros hijos tengan con Dios depende en gran medida del ejemplo y la enseñanza que nosotros les brindemos. Si somos creyentes “relajados” nuestros hijos crecerán como esta generación sin “conocer” a Dios. Además también nos enseña este pasaje sobre el peligro del yugo desigual. Mezclarnos con gente inconversa, ya sea nuestra pareja o nuestros amigos, con toda seguridad pondrá en peligro nuestra vida espiritual. Ahora, mezclarnos no quiere decir no hablarle a gente inconversa, sino más bien, tener relaciones estrechas con gente que no conoce de Cristo.

La consecuencia de esta generación relajada que no conocía a Dios, la encontramos en el último versículo del libro de Jueces. (Jueces 21:25) “En estos días no había rey en Israel; cada uno hacía lo que bien le parecía”.

Que pasaje tan tremendo, pues me ponía a pensar un pueblo donde cada quien hacia lo que quería. Un pueblo viviendo sin Dios ni ley tiene que ser un caos y un degeneramiento difícil de imaginar. El mundo hoy en día esta en caos, por que vive sin Dios, pero por lo menos hay ley. Ahora imagínense sin Dios ni ley!!!!!!!!!. Pero aunque parezca exagerado esas son las consecuencias de una vida espiritual mediocre de no cultivar el andar diario con Dios. Podemos terminar como esta nueva generación de Israelitas, haciendo lo que bien nos parezca y lo mas tremendo, como el pueblo de Israel, recibiendo toda la ira de Dios sobre ellos.

Mucho cuidado jóvenes con “fresquearnos” en nuestra relación con El. Recordemos que hay un enemigo a nuestro alrededor esperando para devorar a quien de oportunidad, y de cada uno de nosotros depende el cuidar nuestra relación con Dios y ese conocimiento íntimo que debemos tener de El y de su palabra.

Un abrazo…………

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Muchas graciasm, un abrazo

Anónimo dijo...

Diciembre es un mes donde caemos facilmente como jovenes por todo lo que el mundo nos ofrece, recordaré esta columna como una advertencia de Dios para no fresquearme.... gracias

Anónimo dijo...

Piechis, gracias por el mensaje. Es necesario "no fresquearnos". Si Dios permite este pasaje en su Palabra es porque él no quiere que nos fresquiemos espiritualmente. Además qué responsabilidad tan grande tenemos como papás con nuestros hijos.. Saludos, Alexis