viernes, 13 de febrero de 2015

Dios nos VIGILA todo el tiempo

No sé qué tanto hayamos pensado y meditado sobre el tema de la OMNIPRESENCIA de DIOS. Hoy meditando en el libro de Job, creo que podemos extraer algunas enseñanzas muy valiosas para nuestras vidas. Veamos el texto:

16 Si, pues, hay en ti entendimiento, oye esto; Escucha la voz de mis palabras. 17 ¿Gobernará el que aborrece juicio? ¿Y condenarás tú al que es tan justo? 18 ¿Se dirá al rey: Perverso; Y a los príncipes: Impíos? 19 ¿Cuánto menos a aquel que no hace acepción de personas de príncipes. Ni respeta más al rico que al pobre, Porque todos son obra de sus manos? 20 En un momento morirán, Y a medianoche se alborotarán los pueblos, y pasarán, Y sin mano será quitado el poderoso. 21 Porque sus ojos están sobre los caminos del hombre, Y ve todos sus pasos. 22 No hay tinieblas ni sombra de muerte Donde se escondan los que hacen maldad. 23 No carga, pues, él al hombre más de lo justo, Para que vaya con Dios a juicio. 24 El quebrantará a los fuertes sin indagación, Y hará estar a otros en su lugar. 25 Por tanto, él hará notorias las obras de ellos, Cuando los trastorne en la noche, y sean quebrantados. 26 Como a malos los herirá En lugar donde sean vistos; 27 Por cuanto así se apartaron de él, Y no consideraron ninguno de sus caminos, 28 Haciendo venir delante de él el clamor del pobre, Y que oiga el clamor de los necesitados. - Job 34:16-28

Es importante tener claro que Dios es OMNIPRESENTE, ÉL está en todas partes, siempre está a mi lado. Dios es JUSTO, y no hace acepción de personas, y juzga a cada uno según su sabiduría. Debo tener claro que los ojos de Dios siempre están sobre mí, esté donde esté, solo o acompañado, en la calle, en la casa, en la oficina, donde sea, ÉL siempre está mirando mis actitudes, mis pensamientos, mis palabras, ÉL todo lo ve, todo lo observa, todo lo analiza, todo lo juzga. ÉL es Dios, a ÉL debo temer, a ÉL debo obedecer, a ÉL debo glorificar siempre con mi vida. Jamás podré esconderme de ÉL. Vaya donde vaya, ÉL estará conmigo para enderezar mis caminos y para tenderme su mano siempre que recurra a ÉL con un corazón limpio.

Salmo 32:8Te haré entender, y te enseñaré el camino en que debes andar; Sobre ti fijaré mis ojos.

Mi deber como creyente no es airarme con los malos, ni vengarme de ellos, ni alegrarme por sus males. Yo debo cumplir con mi tarea de llevar una vida recta, dando buen testimonio, cultivando amistades, dando amor y predicando el evangelio a toda criatura. Dios hará el resto. Si hay corazones endurecidos que no quieren escuchar, Dios se encargará de ellos, Jesucristo viene para hacer justicia con los que no oyeron, con los que se burlaron, con los que fueron indiferentes, pero yo debo tener la conciencia tranquila de que hice lo que tenía que hacer y lo hice bien. Dios dará a cada ser humano el trato y el destino que se merece por una eternidad. Viene a mi mente :

Ezequiel 33:7-9 - A ti, pues, hijo de hombre, te he puesto por atalaya a la casa de Israel, y oirás la palabra de mi boca, y los amonestarás de mi parte. Cuando yo dijere al impío: Impío, de cierto morirás; si tú no hablares para que se guarde el impío de su camino, el impío morirá por su pecado, pero su sangre yo la demandaré de tu mano. Y si tú avisares al impío de su camino para que se aparte de él, y él no se apartare de su camino, él morirá por su pecado, pero tú libraste tu vida.

Estoy seguro de que Dios se encargará de cada ser humano que haya endurecido su corazón y estará presto a tender su mano a aquellos que confiamos HUMILDEMENTE en ÉL. La promesa de Dios es que no nos abandonará y a esa promesa debemos aferrarnos, porque ÉL siempre oirá el clamor de los necesitados.

Salmo 33:20-22 - 20 Nuestra alma espera a Jehová; Nuestra ayuda y nuestro escudo es él. 21 Por tanto, en él se alegrará nuestro corazón, Porque en su santo nombre hemos confiado. 22 Sea tu misericordia, oh Jehová, sobre nosotros, Según esperamos en ti.

Jóvenes, tenemos un Dios OMIPRESENTE, OMNIPOTENTE y JUSTO que analiza y juzga cada minuto que vivamos. A ÉL no se le escapa nada. Es sorprendente ver la grandeza y la JUSTICIA de Dios, estando pendiente de cada minuto que vive cada ser humano, y dando a cada uno el pago que se merece por su forma de actuar.

Dios permita que apliquemos esta enseñanza llevando una vida SANTA, irreprensible, sin mancha, entendiendo que Dios me está mirando a cada momento y que conoce mis pensamientos y mi corazón y que ve, analiza y juzga cada uno de mis pasos. Entendiendo que de lo que siembre, de eso mismo voy a segar.

Gálatas_6:7  -  No os engañéis; Dios no puede ser burlado:
pues todo lo que el hombre sembrare, eso también segará.

No hay comentarios: