DEBERES HACIA LOS DEMÁS

El sábado anterior, Dios me permitió enseñar a los Jóvenes, varios de los mandamientos más difíciles de cumplir, por lo menos en mi caso. Quiero en este espacio compartirles las principales idea.

(Romanos 12:14,17-20) “Bendecid a los que os persiguen; bendecid, y no maldigáis. 12:17 No paguéis a nadie mal por mal; procurad lo bueno delante de todos los hombres. 12:18 Si es posible, en cuanto dependa de vosotros, estad en paz con todos los hombres. 12:19 No os venguéis vosotros mismos, amados míos, sino dejad lugar a la ira de Dios; porque escrito está: Mía es la venganza, yo pagaré, dice el Señor. 12:20 Así que, si tu enemigo tuviere hambre, dale de comer; si tuviere sed, dale de beber; pues haciendo esto, ascuas de fuego amontonarás sobre su cabeza”

1. AYUDA A TUS ENEMIGOS. (V.14,20)

Primer mandamiento, debemos ayudar a nuestros enemigos. ¿Fácil?, no, por el contrario muy difícil, pero es lo que dice la Biblia. Algunos pueden pensar que no tienen enemigos, pero saben que muy probablemente si tenemos gente que nos persigue. Y ese perseguir puede ser tomado literalmente como alguien que anda tras de ti buscando hacerte daño o buscando tu caída. Pero también pueden ser personas que están en contra tuya. Esas personas que siempre están en desacuerdo contigo, yal vez con disimulo buscándote la caída.

Mandamiento difícil este, pero se puede hacer y en la Biblia hay un hombre que lo hizo perfectamente y nos dejó su ejemplo, Jesucristo. Hablando él dice en (Lucas 6:27-29) “Pero a vosotros los que oís, os digo: Amad a vuestros enemigos, haced bien a los que os aborrecen; 6:28 bendecid a los que os maldicen, y orad por los que os calumnian. 6:29 Al que te hiera en una mejilla, preséntale también la otra; y al que te quite la capa, ni aun la túnica le niegues”

2. ACTUA BIEN. (V.17-18)

Segundo desafío de parte de Dios “Actúa bien”. La parte b del versículo 17, dice “procurad lo bueno delante de todos los hombre”. Creo que está claro. Nos exhorta Dios a siempre estar pendientes de dar buen testimonio delante de todos los hombres. (1 Corintios 11:1) “Sed imitadores de mí, así como yo de Cristo”. Pablo es un hombre que nos desafía a imitarlo, porque el imitaba a Cristo. Pablo siempre se conducía bien y siempre procuraba lo bueno delante de los hombres, porque tenía un ejemplo perfecto a quien imitar, el señor Jesucristo.

Ahora hay algo importante en esta parte b del versículo 17 y es que dice que debemos procurar el bien delante de TODOS los hombres, no solamente delante de los hermanos en la iglesia.

Ahora seguro habrá gente con la que nos cuesta tener empatía. Pues, es un mandato de Dios, estar en paz también con ellos.

(Lucas 6:32) “Porque si amáis a los que os aman, ¿qué mérito tenéis? Porque también los pecadores aman a los que los aman. 6:33 Y si hacéis bien a los que os hacen bien, ¿qué mérito tenéis? Porque también los pecadores hacen lo mismo”

Que buen pasaje. Nosotros tenemos a Cristo en el corazón y eso debe hacernos personas distintas, personas especiales,

3. APOYATE EN DIOS. (V.17ª-19)

Dice el versículo 17ª, “No paguéis a nadie mal por mal”. Y tal vez es la tendencia que tenemos, a actuar poniendo en práctica el famoso dicho del “ojo x ojo”.

(Mateo 5:38-39) “Oísteis que fue dicho: Ojo por ojo, y diente por diente. Pero yo os digo: No resistáis al que es malo; antes, a cualquiera que te hiera en la mejilla derecha, vuélvele también la otra”. Nos encanta ese ojo por ojo. El me hizo esto, yo le devuelvo lo mismo. Como a mí me hacen, yo hago. Hoy Dios nos enseña todo lo contrario.

(Hebreos 10:30-31) “Pues conocemos al que dijo: Mía es la venganza, yo daré el pago, dice el Señor. Y otra vez: El Señor juzgará a su pueblo. 31. ¡Horrenda cosa es caer en manos del Dios vivo!”

Qué bueno sería poder leerles este pasaje a quienes nos persiguen o a quienes nos hacen daño. Decirles “Dios arreglara con ustedes cuentas por mí y para que sepan, horrenda cosa es caer en manos del Dios vivo”.

Yo creo que luchamos con entender promesas como estás de Dios, y por eso aún queremos hacer justicia por nuestras propias manos.

3 mandamientos, como dije al principio, nada fáciles, de cumplir, pero igualmente 3 desafíos que Dios te plantea para que sigas en el proceso de parecerte cada día más a Jesucristo.