viernes, 3 de abril de 2015

Cada COSA en su DEBIDO MOMENTO

A las personas a quienes más admiro son aquellas que confían plenamente en Dios y esperan pacientemente a que Dios les muestre el camino a seguir, sin angustiarse, sin desesperarse, viviendo el HOY y esperando que sea Dios el que muestre las acciones del mañana.

Al respecto hay un precioso pasaje en el libro de Eclesiastés que nos muestra que TODO tiene su tiempo y que si Dios lo ha puesto ahí, es porque es IMPORTANTE esperar en ÉL.

1Todo tiene su tiempo, y todo lo que se quiere debajo del cielo tiene su hora. 2Tiempo de nacer, y tiempo de morir; tiempo de plantar, y tiempo de arrancar lo plantado; 3tiempo de matar, y tiempo de curar; tiempo de destruir, y tiempo de edificar; 4tiempo de llorar, y tiempo de reír; tiempo de endechar, y tiempo de bailar; 5tiempo de esparcir piedras, y tiempo de juntar piedras; tiempo de abrazar, y tiempo de abstenerse de abrazar; 6tiempo de buscar, y tiempo de perder; tiempo de guardar, y tiempo de desechar; 7tiempo de romper, y tiempo de coser; tiempo de callar, y tiempo de hablar; 8tiempo de amar, y tiempo de aborrecer; tiempo de guerra, y tiempo de paz. 9¿Qué provecho tiene el que trabaja, de aquello en que se afana? - Eclesiastés 3:1-9

Lamentablemente vivimos en medio de un mundo cada vez MAS ACELERADO, y muchas veces nos dejamos arrastrar por ese acelere, pero lo que Dios nos enseña es que el afán no debe tener cabida en nuestras vidas, ya que por más que nos afanemos no podremos hacer mejor las cosas.

Dios nos enseña que todo tiene su tiempo y que todo los que se quiere debajo del cielo tiene su hora. Nuestro deber es saber planificar cada cosa en la hora que más convenga y con la ayuda de Dios. Que importante es este consejo, a mí me enseña mucho, ya que soy muy afanoso y debo entender que si mi vida está 100% bajo el control de Dios, debo disfrutar plenamente cada momento que ÉL me regala y me permite compartir con los demás, haciendo las cosas honesta y sabiamente, sin afanes, buscando el mejor PROVECHO de cada espacio, que se cumpla el propósito divino y que Dios sea glorificado.

Dios permita que hoy nos quede claro que no debemos apresurarnos en nada, sino esperar para hacer cada cosa en su tiempo, cada actividad que hagamos debe ser planeada cuidadosamente, entendiendo que si Dios controla 100% nuestras vidas debemos disfrutar cada momento al 100%. Es importante sacar provecho de cada circunstancia que Dios nos permita vivir, sin afanes, pensando siempre en si se cumplió o no el OBJETIVO de cada actividad que desarrollamos y DESCANSAR en ÉL, con la plena certeza de que si le OBEDECEMOS, ÉL no se va a equivocar en lo más mínimo.

¡ TRANQUILO ! ... Todo tiene su tiempo, es en el momento de Dios, ese Dios OMNISCIENTE que TODO los conoce y nos exhorta a esperar y descansar en ÉL, mostrándonos que cada cosa llegará a Su Tiempo.

Es impactante entender con mucha claridad que NO debo afanarme por nada, Dios ya lo tiene todo planeado, y yo, debo acogerme a sus planes y NO tratar de hacer las cosas a mi manera y en mí tiempo, sino esperar a que TODO se haga en el tiempo de Dios.

Creo que la mejor forma de APLICAR esta enseñanza es siendo más paciente, sereno y tranquilo, sin afanarme por nada, entendiendo que cada circunstancia que tengo que vivir es porque ASÍ lo ha definido Dios y que debo por lo tanto esperar y descansar en ÉL. 

Si realmente queremos tener PAZ en nuestra vidas, creo que nos CAE muy bien el RECORDAR y VIVIR este pasaje:

Filipenses 4:6-7 - 6Por nada estéis afanosos,
sino sean conocidas vuestras peticiones delante de Dios en toda oración y ruego,
con acción de gracias. 7Y la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento,

guardará vuestros corazones y vuestros pensamientos en Cristo Jesús.

No hay comentarios: