lunes, 24 de noviembre de 2014

TODO EL DIA, TODA LA NOCHE

Isaías 26:9

“26:9 Con mi alma te he deseado en la noche, y en tanto que me dure el espíritu dentro de mí, madrugaré a buscarte; porque luego que hay juicios tuyos en la tierra, los moradores del mundo aprenden justicia.”

Qué bueno terminar el día deseando la compañía de Dios y su presencia. Esto implica entender que El está contigo y que lo que hagas, vas a tener al Dios del universo mirándote.

Cuando deseamos realmente su presencia en nuestro día a día, estoy seguro que lo que menos querremos será fallarle o pecar. Muchas veces ese deseo no es tan fuerte y podemos llegar al punto de pensar que El no está por ahí y por lo tanto pecar será más sencillo. Déjame decirte que NO, aun así el nos ve y como un padre a un hijo debe corregirnos.

Algo bien lindo que nos enseña este pasaje es que cada día que puedas abrir los ojos busquemos a Dios. La mejor forma y la mas practica es por medio de esa cita diaria y especial que puedes tener en su palabra y por medio de la oración.

Meditar en la Biblia, buscar el concejo de Dios en Oración, sentir que el va al lado tuyo cuidándote, respaldándote y acompañándote todos los días de tu vida no tiene valor.

Algunas veces tendemos a querer dejar esa compañía por fuera para vivir o entrar en ese pecado “concupiscencia” al que crees que vencer no es fácil y que es momento de decirle a Dios que se haga a un lado por un momento.

Ahí es cuando más debemos pedir y desear su compañía; ese cuanto de que no eres capaz no te lo puedes creer. Jesucristo venció al pecado y la muerte y con su protección estoy seguro de que también podemos hacerlo.

Desea a Dios todas las noches y Madruga a Buscarlo.

Una buena fórmula para pasar los mejores días, brillando y glorificando a nuestro padre.


Lindo día.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Lindo consejo... Gracias

Anónimo dijo...

:3 Gracias