sábado, 18 de octubre de 2014

VENTAJA


En el mundo actual el préstamo de dinero, el cobro de intereses y la capitalización de los mismos son aceptados, sin embargo este asunto a la luz de la palabra de Dios presenta varias diferencias con la realidad que vivimos.

Veamos el pasaje que guía esta entrada contenido en Éxodo 22:25: “Cuando prestares dinero a uno de mi pueblo, al pobre que está contigo, no te portarás con él como logrero, ni le impondrás usura.

En este pasaje podemos ver que existe una persona que tiene el dinero y otra de escasos recursos que lo necesita y Dios indica que esta no debe ser una oportunidad para sacar provecho o lucrarse.

Veamos otras porciones de la palabra que confirman esta verdad así:

Deuteronomio 23:19
No exigirás de tu hermano interés de dinero, ni interés de comestibles, ni de cosa alguna de que se suele exigir interés.”

Levítico 25:35-36
“Y cuando tu hermano empobreciere y se acogiere a ti, tú lo ampararás; como forastero y extranjero vivirá contigo. No tomarás de él usura ni ganancia, sino tendrás temor de tu Dios, y tu hermano vivirá contigo. No le darás tu dinero a usura, ni tus víveres a ganancia.

Nehemías 5:7
Entonces lo medité, y reprendí a los nobles y a los oficiales, y les dije: ¿Exigís interés cada uno a vuestros hermanos? Y convoqué contra ellos una gran asamblea,

Salmos 15:5
Quien su dinero no dio a usura,
Ni contra el inocente admitió cohecho.
El que hace estas cosas, no resbalará jamás”

Proverbios 28:8
“El que aumenta sus riquezas con usura y crecido interés,
Para aquel que se compadece de los pobres las aumenta.”

Ezequiel 18:5-9
“Y el hombre que fuere justo, e hiciere según el derecho y la justicia; que no comiere sobre los montes, ni alzare sus ojos a los ídolos de la casa de Israel, ni violare la mujer de su prójimo, ni se llegare a la mujer menstruosa, ni oprimiere a ninguno; que al deudor devolviere su prenda, que no cometiere robo, y que diere de su pan al hambriento y cubriere al desnudo con vestido, que no prestare a interés ni tomare usura; que de la maldad retrajere su mano, e hiciere juicio verdadero entre hombre y hombre, en mis ordenanzas caminare, y guardare mis decretos para hacer rectamente, éste es justo; éste vivirá, dice Jehová el Señor.”


Jóvenes, en algún momento de nuestra vida podemos estar en alguna de las dos situaciones descritas y es nuestro deber actuar con sabiduría en este aspecto y tener en cuenta las pautas bíblicas y el consejo de nuestros líderes al respecto.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Gracias... Que bueno recordarlo