lunes, 22 de agosto de 2011

NO REFRENEMOS NUESTROS LABIOS

SALMOS 40:9-10
He anunciado justicia en grande congregación; He aquí, no refrené mis labios,
Jehová, tú lo sabes. No encubrí tu justicia dentro de mi corazón; He publicado tu fidelidad y tu salvación; No oculté tu misericordia y tu verdad en grande asamblea.



Este fin de semana Dios nos permitió viajar a la ciudad de Cúcuta como ministerio de jóvenes con el propósito de glorificarlo mediante la presentación de diferentes obras de teatro, asistiendo a la ciclo vía, compartiendo con la gente el plan de salvación en diferentes parques, centros comerciales, y creciendo en nuestra hermandad con el fin de servirle como un solo cuerpo.

Solo Dios nos llevó a anunciarlo en medio de gran congregación, solo Dios nos dio la capacidad para no refrenar nuestros labios, solo Dios nos permitió compartir nuestros testimonios de vida. Solo Dios nos dio los permisos para presentarnos en medio de la oposición, el mejor sonido, la mejor tarima, todo es de El.

Hoy Dios quiere que esta porción de la Biblia sea una realidad en nuestras vidas todos los días de nuestra existencia, que publiquemos su FIDELIDAD Y SU SALVACIÓN ante uno solo o ante muchos.

Ahora que medito en lo que Dios hizo, veo que Colombia para Cristo es una realidad y que participemos en esa realidad es una decisión que debe tomar cada uno de nosotros, anunciando, no refrenando nuestros labios, no encubriendo, publicando y no ocultando el evangelio de nuestro Señor Jesucristo.

PORQUE ESTE DIOS ES DIOS NUESTRO ETERNAMENTE Y PARA SIEMPRE; EL NOS GUIARÁ AUN MÁS ALLÁ DE LA MUERTE. Salmos 48:14

Buen día, Gracias Dios, gracias iglesia, gracias hermanos!

1 comentario:

Diego Julian Pena Ibanez dijo...

Este fin de semana marco mi vida, fue una de las mejores cosas que me han pasado; Pero conocer el evangelio y anunciarlo a muchas personas sedientas de Cristo, es algo indescriptible ver como Dios usa nuestros labios y cuerpos para salvar almas perdidas es el mayor gozo que puede tener un hijo de Dios. Muchas gracias Iglesia, espero seguir participando de estas grandes obras.