LA HUMILDAD

(Romanos 12:3) “Digo, pues, por la gracia que me es dada, a cada cual que está entre vosotros, que no tenga más alto concepto de sí que el que debe tener, sino que piense de sí con cordura, conforme a la medida de fe que Dios repartió a cada uno.

Basándome en este pasaje, Dios me dio la oportunidad de compartir a los jóvenes sobre la humildad, teniendo claro en primer lugar, que es pecado.

(Proverbios 21:4) “Altivez de ojos, y orgullo de corazón, Y pensamiento de impíos, son pecado”.

Y quiero compartir 3 cosas que suceden con quien es altivo y 3 cosas que suceden con quien es humilde. En primer lugar veamos qué pasa con el altivo:

a) Al altivo Dios lo mira de lejos.

(Salmo 138:6) “Porque Jehová es excelso, y atiende al humilde, Mas al altivo mira de lejos.”

Está diciendo este pasaje que si eres orgullos, soberbio, arrogante ni te preocupes por pedirle cosas al señor porque él te mira de lejos. Y no solo los mira de lejos, sino que también resiste a los soberbios. En otras palabras a Dios evita las personas arrogantes, las personas altivas.

(Santiago 4:6) “Pero él da mayor gracia. Por esto dice: Dios resiste a los soberbios, y da gracia a los humildes”

b) El altivo no quedara impune.

Ahora Dios no solo rechaza y mira de lejos a los altivos, sino que también castiga su altivez.

(Proverbios 16:5) “Abominación es a Jehová todo altivo de corazón; Ciertamente no quedará impune”

Este pasaje me ha hecho entender que Dios pone cada cosa en su lugar, y a todas esas personas que anda por el mundo creyéndose más que los demás Dios los castigará en su momento.

c) Los altivos terminan mal.

Tercera consecuencia de la altivez, es que los altivos y orgullosos siempre terminan mal.

(Proverbios 16:18) “Antes del quebrantamiento es la soberbia, Y antes de la caída la altivez de espíritu”.

Las personas humildes, sencillas, todo el mundo las quiere, todo el mundo las respeta y aún las honran, pero todo lo contrario sucede con el arrogante.

(Proverbios 8:13) “El temor de Jehová es aborrecer el mal; La soberbia y la arrogancia, el mal camino, Y la boca perversa, aborrezco”

Ahora miremos que pasa con los humildes:

a) El humilde es atendido por Dios.

Vimos antes como Dios mira de lejos y resiste a los altivos. Ahora en primer lugar nos promete que el humilde es atendido por El.

(Salmo 138:6a) “Porque Jehová es excelso, y atiende al humilde”.

Que bonitas promesas. Los oídos y los ojos de Dios siempre estarán dispuestos a escuchar y a ver a los sencillos y humildes de corazón. Y no solo eso, promete también cuidarlos. (Salmos 116:6) “Jehová guarda a los sencillos; Estaba yo postrado, y me salvó”.

Si tú vives tu vida con sencillez, con modestia, con humildad, Dios siempre va a vivir pendiente de ti y de tus necesidades.

b) El humilde es semejante a Cristo.

Ahora segunda cosa, cuando somos humildes nos hacemos semejantes a Cristo.

(Mateo 11:29) “Llevad mi yugo sobre vosotros, y aprended de mí, que soy manso y humilde de corazón; y hallaréis descanso para vuestras almas”

Jesucristo es el ejemplo supremo de humildad y dice algo más este pasaje la humildad de corazón trae descanso a nuestras almas. El hombre humilde vive tranquilo.

c) El humilde tendrá riqueza, honra y vida.

Y por último, otra promesa, el humilde tendrá riqueza, honra y vida. (Proverbios 22:4) “Riquezas, honra y vida Son la remuneración de la humildad y del temor de Jehová”

La humildad trae riqueza, y no solo riquezas materiales, también riquezas espirituales, trae honra y trae vida, especialmente vida eterna.

Por último quiero dejar una frase que se repite de forma idéntica en dos pasajes de la Biblia: (Santiago 4:6) (1 Pedro 5:5), “DIOS RESISTE A LOS SOBERBIOS, Y DA GRACIA A LOS HUMILDES”