Comenzamos
el recorrido por un nuevo libro de la Biblia también escrito por el profeta
mayor Jeremías que da fe de las circunstancias adversas vividas por el pueblo
judío bajo el yugo babilónico.
El
pasaje que vamos a mirar esta semana es el siguiente:
Lamentaciones de Jeremías 1:7
“Jerusalén, cuando cayó su pueblo en mano del enemigo y no hubo
quien la ayudase,
Se
acordó de los días de su aflicción, y de sus rebeliones,
Y de
todas las cosas agradables que tuvo desde los tiempos antiguos.
La miraron los enemigos, y se burlaron de su caída.”
El
pueblo judío cautivo en Babilonia de manera retrospectiva evocó el pasado y reconoció
su pecado. Sin embargo, este arrepentimiento no pudo ocultar las consecuencias
de su actuar y fue motivo de escarnio para sus adversarios derivando en el
menosprecio del nombre de Jehová.
En la actualidad,
el entorno de la iglesia y de cada uno de nosotros como creyentes individuales hace
que estemos expuestos a la tentación en todas y cada una de las áreas de nuestra
vida, teniendo como ejemplo al Pueblo de Israel más que nunca debemos exaltar
el nombre de Dios huyendo del pecado para no caer y ser objeto de burla.
Dejemos a los burladores en manos de Dios
Proverbios
17:5
“El que
escarnece al pobre afrenta a su Hacedor;
Y el
que se alegra de la calamidad no quedará
sin castigo.”
Ese es el mundo en el que vivimos
Judas 17-18
“Pero
vosotros, amados, tened memoria de las
palabras que antes fueron dichas por los apóstoles de nuestro Señor Jesucristo;
los que os decían: En el postrer tiempo
habrá burladores, que andarán según sus malvados deseos.”
Jóvenes,
las faltas contra Dios provocarán nuestro descenso y devenir en desgracia, ello
permitirá el ser manipulados por nuestros enemigos y convertirnos en una
especie de bufones para el mundo y Satanás. No permitamos que el pecado se
manifieste en nuestra vida a tal punto que desmejoremos y permitamos que
nuestra condición y el nombre de nuestro Señor sea mofado.
Un
saludo fraternal a todos.
. M .
2 comentarios:
Gracias.
=(
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