lunes, 7 de diciembre de 2015

PERFECCIONANDONOS EN CRISTO.

La iglesia de Dios es la familia  espiritual que el mismo nos ha dado para crecer dentro de un ambiente adecuado y donde tenemos el mejor ejemplo de nuestro señor Jesucristo como hermano mayor.

El propósito de la iglesia en nuestra vida es el de perfeccionarnos y para esto la Biblia nos enseña con dos pasajes como lo hace.

“4:11 Y él mismo constituyó a unos, apóstoles; a otros, profetas; a otros, evangelistas; a otros, pastores y maestros, 4:12 a fin de perfeccionar a los santos para la obra del ministerio, para la edificación del cuerpo de Cristo, 4:13 hasta que todos lleguemos a la unidad de la fe y del conocimiento del Hijo de Dios, a un varón perfecto, a la medida de la estatura de la plenitud de Cristo; 4:14 para que ya no seamos niños fluctuantes, llevados por doquiera de todo viento de doctrina, por estratagema de hombres que para engañar emplean con astucia las artimañas del error, 4:15 sino que siguiendo la verdad en amor, crezcamos en todo en aquel que es la cabeza, esto es, Cristo, 4:16 de quien todo el cuerpo, bien concertado y unido entre sí por todas las coyunturas que se ayudan mutuamente, según la actividad propia de cada miembro, recibe su crecimiento para ir edificándose en amor.Efesios 4:11-16

Dios mismo se encargó de constituir a nuestros pastores y maestros, personas de carne y hueso que guiadas por la Biblia se encargan de llevarnos por la voluntad de Dios que es conformarnos a la imagen y semejanza de nuestro señor Jesús.

“3:16 Toda la Escritura es inspirada por Dios, y útil para enseñar, para redargüir, para corregir, para instruir en justicia, 3:17 a fin de que el hombre de Dios sea perfecto, enteramente preparado para toda buena obra.” 2 Timoteo 3:16-17

Este versículo nos muestra la necesidad de la Biblia para poder ser enseñados, pero también para ser redargüidos y exhortados.

Nuestros pastores y maestros aman a sus ovejas y siempre van a querer lo mejor para ellas aunque esto implique tener que ser fuertes pero respaldados por la palabra de Dios. Los mejores concejos y aun la mejor disciplina la vamos a recibir de hombres de Dios que usan la Biblia y con amor nos corrigen e instruyen.

Hoy los invito a que en nuestro proceso de perfeccionamiento le pidamos a  Dios un corazón humilde y sumiso ante nuestros pastores y maestros para poder recibir cada concejo que venga de ellos. Sin duda es el mismo Dios el que los está usando como instrumento para que tu vida brille más cada Día.

Gracias a Dios por nuestra familia espiritual y ese ambiente adecuado que nos da para crecer.

Lindo Día.

Nos vemos mañana


Juanga.

No hay comentarios: