martes, 4 de noviembre de 2014

EL PROPÓSITO MÁS GRANDE DE NUESTRA VIDA

Quisiera empezar esta entrada recomendándote que saques un tiempo y leas el Salmo 103 que nos habla de los beneficios que Dios ha dado a nuestra y diría que se queda corto porque verdaderamente lo que Dios hace en la vida de un verdadero creyente es inmenso, inmerecido y es solo por su gracia, por su gran amor con que nos amó dando a su Hijo Jesús en la cruz.

Pero por si fuera poco nos da propósito para vivir, nos da el privilegio de que nosotros seamos portadores de su gran gloria en este mundo, es mostrar su presencia, que lo puede llenar todo, es mostrar su luz admirable; esto es lo que Dios nos enseña por medio de su pueblo Israel cuando Salomón termina toda la obra del templo, un templo que mostraba la grandeza de Dios y su majestad, pero faltaba algo y era el arca del pacto que contenían las dos tablas de piedra de Moisés, la ley de Dios y Salomón la traslada al templo y pone Salomón a los levitas cantores de los principales y 120 sacerdotes con trompetas, y pasa algo que es impactante: 2 CRÓNICAS 5: 12-14 "y los levitas cantores, todos los de Asaf, los de Hemán, y los de Jedutún, juntamente con sus hijos y sus hermanos, vestidos de lino fino, estaban con címbalos y salterios y arpas al oriente del altar; y con ellos ciento veinte sacerdotes que tocaban trompetas:)
13. Cuando sonaban, pues, las trompetas, y cantaban todos a una, para alabar y dar gracias a Jehová: y a medida que alzaban la voz con trompetas y címbalos y otros instrumentos de música, y alababan a Jehová, diciendo: Porque él es bueno, porque su misericordia es para siempre: entonces la casa se llenó de una nube, la casa de Jehová.
14. Y no podían los sacerdotes estar allí para ministrar, por causa de la nube; porque la gloria de Jehová había llenado la casa de Dios."

Que impactante lo que estaba pasando en este momento en la historia de Israel, nos enseña lo que Dios quiere, lo que Dios anhela y es mostrar su gran gloria, su presencia real en nuestras vidas, visible, los demás se pueden dar cuenta de que es Dios y el inconverso quiere esto que ese hijo de Dios refleja.
Hay una vestidura que tenían los levitas cantores y es el lino fino y según Apocalipsis 19: 8 son esas acciones justas de los santos, es limpio y resplandeciente, reflejando esa santidad que Dios quiere que tengamos en nuestra vida, haciendo lo que es justo delante de Dios y lo que es justo es que le alabemos, lo justo es que le demos gracias en todo tiempo porque él es bueno y para siempre es su misericordia y solo él es digno de ser alabado.

No es justo que vivamos vidas hipócritas que pisotean el sacrificio de Cristo en la cruz, no es lo justo que en vez de mostrar la gloria de Dios que lo llena todo llevar una vida que no refleja la santidad de Dios, es tiempo aun de hacer lo justo delante de los ojos de Dios y de los hombres.

Un abrazo grande y que mostremos la gloria de Dios que es lo justo.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Que bonito. Gracias