JESÚS SANA EL ALMA y EL CUERPO

El Señor trató hasta la saciedad de mostrarle a su pueblo que ÉL era el Mesías prometido y usó todo tipo de señales y prodigios, pero siempre encontró rechazo de parte de ellos. Algo muy, pero muy parecido a lo que encontramos en el mundo de hoy. Un pasaje bien importante de las Escrituras que nos sirve mucho a todos. Ojalá hiciéramos el ejercicio de desmenuzarlo al máximo y sacar de él todo el PROVECHO POSIBLE.  

¹⁷Aconteció un día, que él estaba enseñando, y estaban sentados los fariseos y doctores de la ley, los cuales habían venido de todas las aldeas de Galilea, y de Judea y Jerusalén; y el poder del Señor estaba con él para sanar. ¹⁸Y sucedió que unos hombres que traían en un lecho a un hombre que estaba paralítico, procuraban llevarle adentro y ponerle delante de él. ¹⁹Pero no hallando cómo hacerlo a causa de la multitud, subieron encima de la casa, y por el tejado le bajaron con el lecho, poniéndole en medio, delante de Jesús. ²⁰Al ver él la fe de ellos, le dijo: Hombre, tus pecados te son perdonados. ²¹Entonces los escribas y los fariseos comenzaron a cavilar, diciendo: ¿Quién es éste que habla blasfemias? ¿Quién puede perdonar pecados sino sólo Dios? ²²Jesús entonces, conociendo los pensamientos de ellos, respondiendo les dijo: ¿Qué caviláis en vuestros corazones? ²³¿Qué es más fácil, decir: Tus pecados te son perdonados, o decir: Levántate y anda? ²⁴Pues para que sepáis que el Hijo del Hombre tiene potestad en la tierra para perdonar pecados (dijo al paralítico): A ti te digo: Levántate, toma tu lecho, y vete a tu casa. ²⁵Al instante, levantándose en presencia de ellos, y tomando el lecho en que estaba acostado, se fue a su casa, glorificando a Dios. ²⁶Y todos, sobrecogidos de asombro, glorificaban a Dios; y llenos de temor, decían: Hoy hemos visto maravillas. - Lucas 5:17-26

Hoy, el Señor nos recuerda con mucha claridad que para ÉL no hay nada imposible y que es tan capaz de interceder por nosotros para que nuestros pecados sean perdonados, como para sanar enfermedades que para el hombre parecen imposibles de curar.

Estoy seguro de que muchas veces pedimos casi que mecánicamente y muchas veces no obtenemos la respuesta, debido a que no pedimos con la actitud correcta y con la FE suficiente de que Dios SI es capaz de responder.

La FE es fundamental, si nos acercamos a ÉL con esa plena certeza de que actuará, Él así lo hará.  Para Dios no hay nada imposible, nuestra fe debe permanecer firme, esperando y confiando plenamente en sus promesas de que no nos dejará ni nos abandonará.

Así sea el detalle más insignificante, debemos ponerlo a SU CONSIDERACIÓN, y debemos confiar plenamente en las promesas que Dios nos da a través de las enseñanzas de Jesús, entendiendo que ÉL es Dios y que por lo tanto debemos obedecer a todas sus recomendaciones y esperar plenamente en que ÉL cumplirá fielmente todas sus promesas.

Tengamos por seguro que el mundo se MARAVILLARÁ ante su manifestación, que ante ÉL se doblará toda rodilla en los cielos y en la tierra y que somos bienaventurados al tenerlo en nuestros corazones y saber que Él media por nosotros ante Dios (1 Tim 2:5).

Como les decía es un pasaje de ORO, meditemos profundamente en él…

• Nuestra FE no debe desfallecer
• Debemos llegar a Dios con la plena certeza de que ÉL responderá, si lo hacemos con la actitud correcta
• Confiar en el perdón de Dios
• Entregar a ÉL todas nuestras cargas y enfermedades con plena certidumbre de FE
• Entender que para Dios no hay  nada imposible

Aprendemos claramente que Jesús sana el alma y el cuerpo

1. Debemos acudir a Dios no por curiosidad sino por FE (Vs 17-20)

2. El mundo aun viendo su PODER y su Deidad lo sigue rechazando, pobrecitos (Vs 21-23)

3. Jesús es Dios y hará maravillas que aún ni nos imaginamos, ante ÉL se doblará toda rodilla (Vs 24-26)

Dios hoy vuelve y nos recuerda El PODER y la Divinidad de Cristo, una enseñanza que viene de un Dios PERDONADOR y misericordioso, dispuesto a sanar nuestros cuerpos y nuestras almas.

A mí, particularmente me asombra la forma tan segura como Jesús enfrenta a sus adversarios, con la plena certeza de que sus promesas se cumplen AL INSTANTE.

Jóvenes, los invito a aplicarlo en nuestro día a día, confiando plenamente en cada uno de los consejos y promesas de Jesús, porque Él es Dios y para ÉL no hay nada imposible;  entregándole todas nuestras cargas de corazón y no desconfiando por un segundo de su Poder.

Fabio