sábado, 23 de julio de 2016

VIVIR TRANQUILOS

Comienza una nueva etapa en nuestro devocional y esta vez vamos caminando de la mano del libro de los Proverbios, su mayoría escritos por el rey Salomón, escrito por el segundo hombre más sabio que ha pisado la tierra después de nuestro Señor Jesucristo, un texto que consigna aforismos, refranes y sentencias para la vida práctica del creyente, vamos comenzar con la conclusión del capítulo primero contenida en el pasaje que transcribimos a continuación:

PROVERBIOS 1:33
“Mas el que me oyere, habitará confiadamente
Y vivirá tranquilo, sin temor del mal.”

Dios establece las buenas consecuencias de acatar sus máximas que se traducen en sabiduría, doctrina, prudencia, justicia, juicio, equidad, sagacidad, inteligencia, y cordura, entre otros.

Lo primero que se destaca de este pasaje es lo referente al oír a Dios y sus buenos efectos.

Proverbios 8:34
Bienaventurado el hombre que me escucha,
Velando a mis puertas cada día,
Aguardando a los postes de mis puertas.”

Proverbios 8:34
El oído que escucha las amonestaciones de la vida,
Entre los sabios morará.”

Santiago 1:19
“Por esto, mis amados hermanos, todo hombre sea pronto para oír, tardo para hablar, tardo para airarse;”

Buenas consecuencias que se traducen en una existencia confiada, vida tranquila y ausencia de miedo a lo ilícito y deshonesto, cualquier daño u ofensa que podamos recibir, alguna forma de desgracia, calamidad o enfermedad.

Corroborémoslo con algunos apartes de la Palabra de Dios.

Isaías 32:17-18
“Y el efecto de la justicia será paz; y la labor de la justicia, reposo y seguridad para siempre. Y mi pueblo habitará en morada de paz, en habitaciones seguras, y en recreos de reposo.”

Salmos 91:10
No te sobrevendrá mal,
Ni plaga tocará tu morada.”

Job 34:29
Si él diere reposo, ¿quién inquietará?
Si escondiere el rostro, ¿quién lo mirará?
Esto sobre una nación, y lo mismo sobre un hombre;”

Hebreos 13:6
“de manera que podemos decir confiadamente:
El Señor es mi ayudador; no temeré
Lo que me pueda hacer el hombre.”

I de Pedro 3:13
¿Y quién es aquel que os podrá hacer daño, si vosotros seguís el bien?

Jóvenes, Dios quiere que conozcamos sus proverbios, los cuales contienen los principios para otro tipo de saberes más profundos, oigamos de verdad su voz, leamos diariamente la Biblia y confiemos a él nuestra existencia, nuestra tranquilidad, y permitamos que arranque el miedo de nosotros.

Aprovechemos esta tarde que no hay reunión de una buena manera, y acompañemos en oración el retiro de niños y a los miembros de nuestro ministerio que se encuentran apoyando este evento tan importante, un abrazo.

MAC

1 comentario:

Anónimo dijo...

Gracias, =).