Dios se encargó por medio de sus profetas el dejar registradas en su palabra grandes y bellicimas promesas para su pueblo Israel, pero devocionalmente hoy en día tenemos tanto que aprender del amor de Dios que excede todo conocimiento como nos lo dice en la carta a los efesios.
Zacarías 1: 16: 17: " Por tanto, así ha dicho Jehová: Yo me he vuelto a Jerusalén con misericordia; en ella será edificada mi casa, dice Jehová de los ejércitos, y la plomada será tendida sobre Jerusalén.
17. Clama aún, diciendo: Así dice Jehová de los ejércitos: Aún rebosarán mis ciudades con la abundancia del bien, y aún consolará Jehová a Sion, y escogerá todavía a Jerusalén."
Por su puesto son promesas de Dios para su pueblo, pero ¿qué podemos aprender nosotros?
1) El nos mira con misericordia, seamos lo que seamos, hayamos hecho lo que fuera, Dios tiene misericordia de nosotros y nos edifica como su casa, su templo.
2) Grande en misericordia pero su plomada será tendida sobre nuestra vida y es lo justo porque Dios quiere que andemos rectamente y no deja pasar por alto nuestro pecado.
3) Aun siendo malos nos rebosará con abundancia del bien, dándonos lo que no merecemos. Así es nuestro Dios.
4) Aun nos consolará y aun nos escogerá.
Terminando Dios me mostraba este pasaje:
2 Pedro 2: 3-4 "Como todas las cosas que pertenecen a la vida y a la piedad nos han sido dadas por su divino poder, mediante el conocimiento de aquel que nos llamó por su gloria y excelencia,
4. por medio de las cuales nos ha dado preciosas y grandísimas promesas, para que por ellas llegaseis a ser participantes de la naturaleza divina, habiendo huido de la corrupción que hay en el mundo a causa de la concupiscencia;"
Dios nos dio preciosas y grandísimas promesas para ser diferentes en el mundo, participando de su divinidad, de su santidad, huyendo de la corrupción que hay en el mundo para ser luz, andar como hijos de luz.
Un abrazo.
JL
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