"Luego que David oyó que Nabal había muerto, dijo: Bendito sea Jehová, que juzgó la causa de mi afrenta recibida de mano de Nabal, y ha preservado del mal a su siervo; y Jehová ha vuelto la maldad de Nabal sobre su propia cabeza. Después envió David a hablar con Abigail, para tomarla por su mujer.
Y los siervos de David vinieron a Abigail en Carmel, y hablaron con ella, diciendo: David nos ha enviado a ti, para tomarte por su mujer.
Y ella se levantó e inclinó su rostro a tierra, diciendo: He aquí tu sierva, que será una sierva para lavar los pies de los siervos de mi señor" I Samuel 25:39-41
Buenas noches, nuevamente es un privilegio poder participar en este blog compartiendo algo que el Señor nos regaló en la semana.
Este último versículo me impactó mucho y buscando una aplicación devocional para mi vida y pensando en la Conferencia de Edificación que comienza este miércoles, que bueno poder decir lo que dijo esta mujer cuando fue buscada para ser tomada por esposa de David.
Esa actitud de sierva que está dispuesta a lavar los pies no solo de su señor, sino los de sus siervos, impresionante!!! fácilmente se hace la última, busca servir con humildad.
Dios me anima a servirle sin pensar en recibir nada a cambio, a servirle siendo útil para los demás y a estar dispuesto a buscar la gloria suya y solo la suya con ese servicio.
Que esta semana sea de servir a los que sirven y mutuamente podamos edificarnos en amor y humildad.
Que el Señor nos enseñe mucho, que se lleve toda la gloria y que muchos conozcan de la Roca, nuestro Señor Jesucristo.
Un abrazo!!!
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