Está semana Dios me hablo muy claro de cómo quiere que le alabe, cual debe ser mi actitud y cuál es el propósito de una verdadera alabanza, por medio de un salmo del rey David en I CRÓNICAS 16: 7-36. Te recomiendo que lo leas completo, un salmo lleno de victoria, de gozo, cuando el pueblo de Dios encabezado por su rey trajo el Arca del Pacto de Jehová a Jerusalén.
Solo quiero detallar algunos aspectos de cómo Dios quiere que sea nuestra alabanza:
1. Una verdadera alabanza invoca el nombre de Dios (16: 8).
2. Busaca traer su presencia, buscar su rostro, su poder continuamente (no solo los domingos). (16: 11).
3. Debe ser con un corazón alegre, agradecido con Dios. (16: 10).
4. Recordar las maravillas que ha hecho en nuestras vidas, sus prodigios y milagros. (16: 12)
5. Recordar sus promesas, aún reclamar esas promesas. (16: 13-18).
6. Recordar su poderosa salvación, de donde nos sacó, como nos liberó, su protección. (16: 19-22).
7. Para dar a conocer sus obras a las naciones y pueblos, anunciar sus maravillas, proclamar de día en día su salvación. (16: 9; 23-24).
8. Cantarle a Él con Salmos. (16: 9)
9. Porque es digno de suprema alabanza. (16: 25).
10. Exaltar su grandeza, poder, gloria debida a su Nombre. Él es nuestro Dios. (16: 25-29).
11. En santidad postrados ante Él (con corazón humilde). (16: 29).
12. Aún su creación le alaba, tanto más nosotros (de lo cual ninguno tiene excusas). (16: 30-33).
13. Le alabamos porque Él es bueno y su misericordia es eterna, para siempre. (16: 34).
14. Porque vendrá a juzgar a las naciones. Él vendrá con poder. (16: 33).
15. Nos librará de las naciones trayendo gran salvación. (16: 35).
La verdadera alabanza debe ser continua, nuestra vida debe ser un canto de alabanza a nuestro Dios.
Pensemos en cómo es nuestra alabanza, Dios nos da mucho en que pensar y debemos hacer ajustes en nuestras vidas para que nuestras alabanzas lleguen a la presencia de Dios en olor fragante.
Que pases un buen fin de semana. Abrazos.