Centrémonos
en este pasaje que habla acerca del ajuste de cuentas por parte de Dios con sus
enemigos.
Jeremías 46:10
“Mas ese día será para Jehová Dios de los
ejércitos día de retribución, para vengarse de sus enemigos; y la espada
devorará y se saciará, y se embriagará de la sangre de ellos; porque
sacrificio será para Jehová Dios de los ejércitos, en tierra del norte junto al
río Eufrates.”
Dios
pronuncia estas palabras en medio de la indisciplina del pueblo de Judá y ante
el cerco militar de los egipcios por oeste y los caldeos por el este.
La venganza es de Dios
La
hostilidad contra la fe verdadera se ha hecho presente desde la historia de los
ángeles, así como en la humanidad. Sin embargo, tenemos que entender que sean
seres espirituales u hombres, la afrenta de estas criaturas es ante el Creador
y suya es la venganza en contra de estos actos rebeldes.
Deuteronomio 32:35
“Mía es la venganza y la retribución;
A su tiempo su pie resbalará,
Porque el día de su aflicción está cercano,”
A su tiempo su pie resbalará,
Porque el día de su aflicción está cercano,”
Salmos
94:1-2
“Jehová, Dios de las venganzas,
Dios de las venganzas, muéstrate.
Engrandécete,
oh Juez de la tierra;
Da
el pago a los soberbios.”
Ezequiel
25:17
“Y
haré en ellos grandes venganzas con
reprensiones de ira; y sabrán que yo soy
Jehová, cuando haga mi venganza en ellos.”
Miqueas
5:15
“...
y con ira y con furor haré venganza en
las naciones que no obedecieron.”
Dejemos la venganza en manos del
Señor
Descansemos
en Dios cuando seamos afrentados por causa de nuestra fe en Jesucristo.
Tengamos siempre presente que no está en nuestras manos ejercer las vías de
hecho y hacer justicia por nuestra propia mano, Él es quien tiene el legítimo
derecho para actuar
Nahúm
1:2
“Jehová
es Dios celoso y vengador; Jehová es
vengador y lleno de indignación; se
venga de sus adversarios, y guarda enojo para sus enemigos.”
Romanos
12:19
“No os venguéis vosotros mismos, amados
míos, sino dejad lugar a la ira de Dios;
porque escrito está: Mía es la venganza,
yo pagaré, dice el Señor.”
Jóvenes,
descansemos en el Señor poniendo todas nuestras causas en Él, pronto llegará el
día de su manifestación y su justicia, pero tengamos
presente que muchos aún no han oído de la Salvación de Jesucristo y no habrá
forma para ellos de escapar de su espada. Entreguemos nuestro anhelo de
retribución en nuestro Creador y llevemos su Evangelio.
Tengamos
presente en nuestras oraciones el Retiro de Niños.
Saludos.