Seguimos
adelante con el hermoso libro de los Proverbios, ya llegamos a la mitad de esta
obra repleta de sabiduría y razones prácticas para la vida según la voluntad de
Dios, en estos días que el tema de la paz es recurrente en nuestro país y una
vez dado a conocer el acuerdo final firmado entre nuestro gobierno y un grupo
revolucionario, queremos revisar el siguiente versículo que se relaciona con
este tema.
Proverbios 16:7
“Cuando
los caminos del hombre son agradables a
Jehová,
Aun a sus enemigos hace estar en paz con él.”
Nuestro
Padre celestial nos habla de una buena consecuencia de transitar sus veredas
dando como resultado la paz.
Este
concepto enmarca una situación en la que no existe lucha armada en un país o
entre países, así como la relación de armonía entre las personas, sin
enfrentamientos ni conflictos, y
el estado
de quien no está perturbado por ningún conflicto o inquietud.
En
primera medida parecen descripciones bondadosas, sin embargo, en ellas no se
incluye de ninguna manera el nombre de Jesús, una paz sin Dios es parcial e
incompleta. Miremos lo que el Señor establece en su palabra.
Isaías
53:5
“Mas él
herido fue por nuestras rebeliones, molido por nuestros pecados; el castigo de nuestra paz fue sobre él,
y por su llaga fuimos nosotros curados.”
Hechos
de los apóstoles 10:36
“Dios
envió mensaje a los hijos de Israel, anunciando el evangelio de la paz por medio de Jesucristo; éste es Señor de
todos.”
Romanos
5:1
“Justificados,
pues, por la fe, tenemos paz para con
Dios por medio de nuestro Señor Jesucristo;”
Efesios
2:14-16
“Porque él es nuestra paz, que de ambos
pueblos hizo uno, derribando la pared intermedia de separación, aboliendo en su
carne las enemistades, la ley de los mandamientos expresados en ordenanzas,
para crear en sí mismo de los dos un solo y nuevo hombre, haciendo la paz, y
mediante la cruz reconciliar con Dios a ambos en un solo cuerpo, matando en
ella las enemistades.”
Colosenses
1:20
“… y
por medio de él reconciliar consigo todas las cosas, así las que están en la
tierra como las que están en los cielos, haciendo
la paz mediante la sangre de su cruz.”
Jóvenes,
el mundo y sus gobiernos pretenden poder gozar del bienestar prescindiendo de
Dios, esa especie de satisfacción pretendida es una falacia, sin Cristo ninguna
forma de paz es sostenible en el tiempo, entendamos que como se establece en el
pasaje revisado en esta entrada, esa condición depende de él siendo el exclusivo camino
para llegar a ella, como nos escribió
nuestro pastor ayer, la única forma de garantizarla a través del cumplimiento
de la Gran Comisión, es yendo a predicar el Evangelio de paz a todo ser humano,
el mundo debe conocer la verdad para tener la oportunidad de salir de la
ignorancia y la condenación.
Nunca olvidemos nuestra condición de luminares.