Abram
Génesis 12:10-13: Hubo entonces hambre en la tierra, y descendió Abram a Egipto para morar allá; porque era grande el hambre en la tierra. Y aconteció que cuando estaba para entrar en Egipto, dijo a Sarai su mujer: He aquí, ahora conozco que eres mujer de hermoso aspecto; y cuando te vean los egipcios, dirán: Su mujer es; y me matarán a mí, y a ti te reservarán la vida. Ahora, pues, di que eres mi hermana, para que me vaya bien por causa tuya, y viva mi alma por causa de ti.
Isaac
Génesis 26:1-3: Después hubo hambre en la tierra, además de la primera hambre que hubo en los días de Abraham; y se fue Isaac a Abimelec rey de los filisteos, en Gerar. Y se le apareció Jehová, y le dijo: No desciendas a Egipto; habita en la tierra que yo te diré. Habita como forastero en esta tierra, y estaré contigo, y te bendeciré; porque a ti y a tu descendencia daré todas estas tierras, y confirmaré el juramento que hice a Abraham tu padre.
Génesis 26:6-7: Habitó, pues, Isaac en Gerar. Y los hombres de aquel lugar le preguntaron acerca de su mujer; y él respondió: Es mi hermana; porque tuvo miedo de decir: Es mi mujer; pensando que tal vez los hombres del lugar lo matarían por causa de Rebeca, pues ella era de hermoso aspecto.
Buenas noches, en mi devocional leía acerca de la vida de Abraham y su hijo Isaac y cómo la Biblia registra de manera similar dos situaciones adversas que tuvieron que afrontar.
En momentos difíciles podemos contemplar la idea de descender a Egipto, “el mundo” y es ahí cuando Dios se manifiesta pidiendo fidelidad y no ir a hacer cosas que no debemos, sino esperar y confiar en su poder para guiarnos en medio de cualquier situación.
El temor llevó a estos dos hombres a tomar decisiones apresuradas y estas decisiones afectaron de manera directa su familia, esto me lleva a pensar en que Dios día a día quiere que aprendamos y no cometamos nuestros mismos errores ni los de nuestros padres. Impresionante la fidelidad de Dios con nosotros, aún cuando nosotros no somos fieles.
Un abrazo para todos.
