Gracias jóvenes por permitirme participar de este espacio tan valioso. Hoy, Dios quiere recordarnos acerca de la gravedad de la DESOBEDIENCIA del hombre y un pasaje que es clave en cuanto a este tema lo encontramos en el libro de Génesis 3:6-24, te invito a que de corazón lo busques en tu Biblia y lo leas ya mismo.
Acá vemos claramente como el hombre peca desobedeciendo la voz de Dios y escondiéndose para ocultar su pecado. Desde el principio el hombre pecó y fue hipócrita, queriendo esconder su pecado, queriendo culpar a los demás y no reconociendo su grave error. Adán culpó a Eva, y Eva culpó a la serpiente.
Lamentablemente es la misma situación que vivimos hoy en día. Son pocos los que realmente aceptan su pecado y se arrepienten, y de ahí la situación tan lamentable que vive la humanidad.
El tener que trabajar es algo que tendremos que hacer hasta que nuestros días terminen, esa obligación de conseguir el pan de cada día con el sudor de nuestra frente, es la consecuencia del pecado original… Es un deber, así lo estableció Dios y así tendremos que obedecerle. El que no trabaje que no coma (2 Tes.3:10). Cada uno de nosotros como verdadero creyente tenemos que dar ejemplo y muy buen testimonio. Mi trabajo debe ser impecable para poder hablar de Cristo con propiedad y con veracidad, mostrando los milagros que ÉL hace al transformar nuestras vidas.
Desobedecer a Dios trae consecuencias graves. Un pecado aparentemente inocente, trajo consecuencias impredecibles. El hecho no fue el comer o no comer del árbol prohibido, la falta GRAVE estuvo en desobedecer a Dios y de ahí que la misma mujer ha sido la principal afectada por el pecado ya que desde entonces ha tenido que concebir con mucho dolor y sacrificio.
Ahora, el hombre también es muy responsable, ya que era él quien había escuchado la voz de Dios acerca de no comer del árbol del bien y del mal, posiblemente no se lo supo comunicar a su mujer o no estuvo cerca de ella para protegerla, así que no podemos echar toda la culpa a ella. Es por eso que Dios impone un yugo bastante grande al hombre, Dios maldijo la tierra y puso al hombre a trabajar duramente para comer del fruto de la tierra.
Debemos entender que la DESOBEDIENCIA a Dios es muy grave y que trae consecuencias inimaginables. No hay nada más recto y útil que escuchar la voz de Dios todos los días, interiorizarla y vivirla a cada instante. Es necesario clamar a Dios por la llenura del Espíritu Santo, a fin de que ÉL tenga cada vez más de nosotros a fin de llegar a la perfección a través de la obediencia a cada uno de sus mandamientos.
A pesar del pecado, desde el principio Dios mostró su misericordia para con el hombre pecador, Dios los cubrió con túnicas de pieles en demostración de que era necesaria la sangre inocente para cubrir el pecado del hombre. Sin embargo la desobediencia tuvo sus consecuencias, ellos fueron desterrados a fin de mostrar el desagrado de Dios hacia el pecado, manifestado inicialmente en la desobediencia a Dios.
Las cosas hoy siguen siendo iguales, Dios aborrece el pecado y las consecuencias, a pesar de su misericordia, son graves. Así, que en resumen debemos Obedecer la voz de Dios, Reconocer nuestras faltas, Trabajar honestamente siendo diligente en conseguir el pan de cada día, Entender la gravedad de la desobediencia a Dios, Tomar los correctivos del caso, Caminar hacia la perfección y la santificación y Reconocer la misericordia de Dios, quien a pesar de nuestro pecado esta siempre dispuesto a perdonar, siempre y cuando haya arrepentimiento.
Tenemos un Dios sabio que ha establecido límites para el hombre y un Dios misericordioso, que a pesar de nuestro pecado siempre ha estado dispuesto a perdonarnos cubriéndonos con la sangre inocente, por eso, debo atender firmemente a cada CONSEJO de Dios, escudriñando sabiamente su Palabra y examinando mi vida a la LUZ de lo que Dios me enseña, tomando inmediatamente los correctivos del caso.
¡¡¡ Que tengas un lindo fin de semana !!!
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