En Deuteronomio 31:1-8 vemos una linda aplicación para los días que vivimos. Dios nos enseña que al igual que a Moisés, ÉL nos quiere mostrar que la Obra es suya y que ÉL la hará con nosotros o sin nosotros… Leámoslo…
1Fue Moisés y habló estas palabras a todo Israel, 2y les dijo: Este día soy de edad de ciento veinte años; no puedo más salir ni entrar; además de esto Jehová me ha dicho: No pasarás este Jordán. 3Jehová tu Dios, él pasa delante de ti; él destruirá a estas naciones delante de ti, y las heredarás; Josué será el que pasará delante de ti, como Jehová ha dicho. 4Y hará Jehová con ellos como hizo con Sehón y con Og, reyes de los amorreos, y con su tierra, a quienes destruyó. 5Y los entregará Jehová delante de vosotros, y haréis con ellos conforme a todo lo que os he mandado. 6Esforzaos y cobrad ánimo; no temáis, ni tengáis miedo de ellos, porque Jehová tu Dios es el que va contigo; no te dejará, ni te desamparará. 7Y llamó Moisés a Josué, y le dijo en presencia de todo Israel: Esfuérzate y anímate; porque tú entrarás con este pueblo a la tierra que juró Jehová a sus padres que les daría, y tú se la harás heredar. 8Y Jehová va delante de ti; él estará contigo, no te dejará, ni te desamparará; no temas ni te intimides.
Es muy posible que si el Señor demora en venir no seamos los líderes de hoy los que veamos la plena realización de Colombia para Cristo en toda su plenitud. Tal vez alcancemos ver la llegada a las 32 capitales, pero lo que vendrá después, si Dios lo permite, será la conquista de cada departamento, de cada provincia, de cada pueblo, y ahí ya no estaremos nosotros. Por tanto, es nuestro deber confiar en las promesas que Dios nos da de no desampararnos nunca y poner todo nuestro empeño en preparar a las futuras generaciones que heredarán la tierra.
Como hijos de Dios, diariamente tenemos que librar muchas batallas: Contra la carne, contra el pecado, contra el enemigo, contra el mundo que trata de hacernos daño y aprovecharse de nuestra buena fe. Gracias a Dios porque siempre nos da su voz de aliento, siempre que tratamos de desfallecer, ÉL nos dice: Esforzaos y cobrad ánimo, nos invita a no temer ni a tener miedo de ellos y nos da una razón MUY VALEDERA: Porque Jehová tu Dios es el que va contigo. Es una seguridad absoluta de que ÉL no nos dejará, ni nos desamparará.
Debemos hacer las cosas tal como Dios no las muestre y no como nosotros queramos. Cuando veamos que ya nuestras fuerzas y capacidades no dan más, debemos obedecer a Dios, ser sensibles a su voz, y delegar lo que haya que delegar, para no ser obstáculo en la Obra. Llegará el momento en que el liderazgo deba pasar a una nueva generación que conquistará a Colombia y al mundo y en ese momento debemos estar preparados para entregar el bastón de mano y esperar que Dios actúe llevándonos a Su presencia con la conciencia limpia de que hemos escuchado su llamado.
Resumiendo, Dios nos invita a entender que nuestras fuerzas desfallecen y llegará el momento de entregar la Obra a una nueva generación, ahora más que nunca lo puedo comprobar por mis quebrantos de salud, puedo comprobar la brevedad de la vida y la fragilidad del cuerpo. Dios nos motiva también a confiar plenamente en que Colombia para Cristo será una realidad plena en manos de Dios y de las nuevas generaciones, es algo real, que vemos día a día por el compromiso tan lindo que vemos en la juventud. Dios quiere que nos esforcemos y cobremos ánimo, que es lo que Dios quiera, no lo que yo quiera. Por fuertes que parezcan los enemigos no debemos acobardarnos, Dios nos dará la victoria.
Hoy entiendo, que debo confiar en que Dios es el que va a mi lado, no debo desanimare por nada, debo animar a esa nuevas generaciones para que se esfuercen y cumpla la Obra que Dios ha puesto en nuestras manos, prepararme para trasmitir o delegar el bastón de nuestra iglesia preciosa.
Es necesario prepararnos a conciencia para el proceso de transición generacional, entendiendo nuestras limitaciones y entendiendo que la Obra es de Dios y no nuestra. Debemos poner de nuestra parte todo lo que esté a nuestro alcance, dejando el resto en manos de Dios y de quienes Dios disponga.
¡¡¡ Que tengas un lindo fin de semana !!!
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