Este principio financiero de gran importancia para la vida del hombre lo encontramos en Génesis 41:32-36; y a pesar de ser algo que a simple vista parece obvio, finalmente no parece serlo al ver la vida de cientos de personas a nuestro alrededor.
Léelo tu mismo…32Y el suceder el sueño a Faraón dos veces, significa que la cosa es firme de parte de Dios, y que Dios se apresura a hacerla. 33Por tanto, provéase ahora Faraón de un varón prudente y sabio, y póngalo sobre la tierra de Egipto. 34Haga esto Faraón, y ponga gobernadores sobre el país, y quinte la tierra de Egipto en los siete años de la abundancia. 35Y junten toda la provisión de estos buenos años que vienen, y recojan el trigo bajo la mano de Faraón para mantenimiento de las ciudades; y guárdenlo. 36Y esté aquella provisión en depósito para el país, para los siete años de hambre que habrá en la tierra de Egipto; y el país no perecerá de hambre.
La tierra bajo el dominio de faraón, estaba pasando por 7 años de abundancia extrema. Años en los que la provisión física no faltaría sobre esta tierra. Años en los que faraón a no ser por la sabiduría y el corazón de “empresario” de José, pudo haber malgastado el superávit de recursos que la tierra misma le estaba generando. Gracias a Dios esto no fue así, y la tierra de Egipto no tuvo que sufrir las posibles malas decisiones de faraón; debido a la buena administración que le dio José a los recursos de esta nación.
Pensemos ahora en nuestra vida y preguntémonos algunas cosas.
¿Qué hacemos con los recursos que Dios nos da en algunas etapas de nuestra vida y que gracias al Señor son recursos que en esos momentos vienen en abundancia? Ejemplos: Las primas salariales de Junio y diciembre, las primas extrasalariales en diferentes épocas del año, las bonificaciones que recibes por tu desempeño laboral, los negocios extras que salen sin haberlos estado esperando, los premios de cualquier naturaleza (cédula de capitalización, torneos deportivos, otros), las donaciones provenientes de diferentes medios, entre otros.
¿Los gastamos de inmediato aún en cosas que ni necesitamos tan solo porque tenemos esos recursos disponibles? O ¿Pensamos en hacer provisión (Tradúzcase ahorrar) para tiempos futuros de los cuales no tenemos certeza de lo que traerán? Recuerda SIEMPRE que el hecho de tener provisión en abundancia, no significa que debamos gastarla en ese mismo instante. Si somos sabios de corazón sabremos hacer provisiones de la abundancia que Dios nos da, para esos posibles momentos de escasez que probablemente llegarán a nuestra vida.
Si en este momento de tu vida te encuentras en una etapa de estrechez económica piensa lo siguiente… ¿Hubo (tiempos pasados) recursos en abundancia en tu vida que malgastaste y que hoy en día serían la posible solución a tus problemas económicos?
Muy seguramente la respuesta es afirmativa. Recuerda este principio, y sin irte a los extremos de la tacañez y la avaricia, aplícalo de inmediato en tu propia vida. Por cierto este principio aplica a las finanzas personales, familiares, empresariales, ministeriales; en fin, a todas y cada una de las áreas de nuestra vida en las que el dinero tiene algún tipo de relación con ellas.
Ya verás los resultados.
Nos vemos mañana.
Una historia extra que acabo de leer...
Una señora muy pobre telefoneó para un programa cristiano de radio pidiendo ayuda. Un brujo del mal que oía el programa consiguió su dirección, llamó a sus secretarios y ordenó que compraran alimentos y los llevaran hacia la mujer,con la siguiente instrucción: Cuando ella pregunte quien mandó estos alimentos, respondan que fue el DIABLO!
Cuando llegaron a la casa, la mujer los recibió con alegría y fue inmediatamente guardando los alimentos que le llevaron los secretarios del brujo. Al ver que ella no preguntaba nada, ellos le preguntaron: ¿La señora no quiere saber quién le envió estas cosas?
La mujer, en la simplicidad de la fe, respondió:- No, mi hijo.. No es preciso. Cuando Dios manda, hasta el diablo obedece!
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