miércoles, 11 de febrero de 2015

MINISTRO DE DIOS

Colosenses 1:25-27 En esta porción del libro de Colosenses podemos ver el testimonio del apóstol Pablo, un siervo de Dios que entiende que Dios mismo le ha constituido como ministro.

El texto nos muestra algunas características especiales de ese ministro, que se convierten en un ánimo y un desafío para nosotros que anhelamos, ser esos siervos aprobados del Señor.

Es constituido por Dios para la gente “De la cual fui hecho ministro, según la administración de Dios que me fue dada para con vosotros

Pablo entendía que Dios le había constituido ministro suyo, labor que tenia que ver con las personas.
Esa palabra ministro que menciona el texto viene del Griego “diakonos” que significa siervo, asistente, diacono, como lo vemos en 1 corintios 3:5, en otros textos esta palabra ministro hace referencia a pastor o profesor bíblico.

Dos cosas interesantes veo en esta primera porción de nuestro texto de estudio:

Las palabras “fui hecho” que nos muestra que un ministro es constituido por Dios, es un don, una gracia, como se enseña  Efesios 3:7 y 4:10-11.

Las palabras “para con vosotros” lo que implica darse a los demás, relacionarte con la gente, ser amable, dar del amor que Dios nos da, sin esperar nada a cambio.   Como lo dice Filipenses 4:5 tratar a la gente con gentileza.

Una siguiente característica de este ministro es:

 Tiene la misión de anunciar la palabra de Dios “para que anuncie cumplidamente la palabra de Dios el misterio que había estado oculto desde los siglos y edades, pero que ahora ha sido manifestado a sus santos"

La misión específica del ministro es predicar-anunciar la biblia (hacerlo cumplidamente). Específicamente ese misterio oculto es el evangelio como lo enseña Efesios 6:19-20  y cuya descripción la vemos en 1 Timoteo 3:16 Dios manifestado en carne, resucitado, visto, predicado, creído, glorificado. Lo que era oculto vino a la luz Jesús murió y resucito al tercer día demostrando que era el Dios encarnado y el Rey de reyes.

Ahora como asistentes del Señor anunciamos el evangelio, necesitamos hacerlo, ay de nosotros si no lo hacemos, se nos fue manifestado para darlo a conocer 1 corintios 9:16-19.

Por último, el texto nos muestra la esperanza que debemos llevar al perdido.

Trae la esperanza de la gloria eterna “, a quienes Dios quiso dar a conocer las riquezas de la gloria de este misterio entre los gentiles; que es Cristo en vosotros, la esperanza de gloria.

Este misterio, está lleno de riquezas de gloria para los que creen:

Por una parte Cristo viene y vive dentro de nosotros como lo enseña Efesios 3:16-21, su presencia nos llena, su poder actúa en nosotros, nos permite ver la vida con sus ojos.

Por otra parte nos da la esperanza de la gloria eterna, el saber que pronto todo pasará y pasaremos toda una eternidad disfrutando de la gloria de Dios, un descanso eterno, un lugar que nadie puede pagar ni teniendo todo el oro del mundo, una gloria que Esteban tuvo la fortuna de ver desde la tierra Hechos 7:54-60

Una gloria que nos espera, dormiremos o seremos arrebatados para estar eternamente con el Señor. Apocalipsis 4:10-11.

No hay comentarios: