En Nehemías el primer capítulo Dios nos enseña como podemos hallar gracia delante del Rey, para ser realmente usados por él y que nuestro servicio a él rinda fruto y fruto que permanezca.
Nehemías 1: 1-4"Palabras de Nehemías hijo de Hacalías. Aconteció en el mes de Quisleu, en el año veinte, estando yo en Susa, capital del reino, que vino Hanani, uno de mis hermanos, con algunos varones de Judá, y les pregunté por los judíos que habían escapado, que habían quedado de la cautividad, y por Jerusalén.
Y me dijeron: El remanente, los que quedaron de la cautividad, allí en la provincia, están en gran mal y afrenta, y el muro de Jerusalén derribado, y sus puertas quemadas a fuego.
Cuando oí estas palabras me senté y lloré, e hice duelo por algunos días, y ayuné y oré delante del Dios de los cielos.
Lo primero que Dios nos enseña es que debemos tener un interes puro y sincero por las cosas que él ama y para esto debo empezar por amarle a él con todo el corazón y con toda el alma y con toda mi mente y con todas mis fuerzas y para este debe reinar Cristo en mi corazón, esto es evidencia de una salvación autentica y va a pasar lo segundo que es amar al prójimo como a mi mismo. Estos son los dos grandes mandamientos. Pero es imposible amar como Dios ama, si yo no le amo sinceramente, guardando sus mandamientos, estando en su palabra, en intimidad con él, es lo más importante y primero que debo hacer para amar como él lo hace. Me intereza por lo que pasa con mis hermanos en la fe? ¿Mi familia que no conoce de Cristo, me preocupa que van para un infierno? ¿Mis amigos, gente en el mundo que aún no ha escuchado del evangelio de salvación? Mi enfoque debe estar en lo eterno. ¿Soy sencible al clamor de la gente que necesitan de Cristo, me duele realmente, que hasta los huesos se debiliten? Debo dejar de poner mi atención solo en mi, en lo que pase conmigo y tener el sentir que hubo en Cristo, en el ápostol Pablo, en Nehemías, que nos duelan las almas de los hombres y nos incomodemos, que pongamos nuestro enfoque en las cosas de arriba.
Nehemías 1: 5-10"Y dije: Te ruego, oh Jehová, Dios de los cielos, fuerte, grande y temible, que guarda el pacto y la misericordia a los que le aman y guardan sus mandamientos;
esté ahora atento tu oído y abiertos tus ojos para oír la oración de tu siervo, que hago ahora delante de ti día y noche, por los hijos de Israel tus siervos; y confieso los pecados de los hijos de Israel que hemos cometido contra ti; sí, yo y la casa de mi padre hemos pecado.
En extremo nos hemos corrompido contra ti, y no hemos guardado los mandamientos, estatutos y preceptos que diste a Moisés tu siervo.
Acuérdate ahora de la palabra que diste a Moisés tu siervo, diciendo: Si vosotros pecareis, yo os dispersaré por los pueblos;
pero si os volviereis a mí, y guardareis mis mandamientos, y los pusiereis por obra, aunque vuestra dispersión fuere hasta el extremo de los cielos, de allí os recogeré, y os traeré al lugar que escogí para hacer habitar allí mi nombre.
Ellos, pues, son tus siervos y tu pueblo, los cuales redimiste con tu gran poder, y con tu mano poderosa.
Lo segundo que nos enseña Nehemías es la importancia de la oración, de llegar a Dios humillados y reconocer su grandeza, nuestro pecado, la importancia de serperdonados por Dios y tener un corazón limpio, reclamar sus promesas, orando la palabra de Dios, orar por los demás y hacerlo sin cesar, sin desmayar. Está es un oración poderosa que llegó al trono de la gracia de Dios.
Nehemías 1: 11"Te ruego, oh Jehová, esté ahora atento tu oído a la oración de tu siervo, y a la oración de tus siervos, quienes desean reverenciar tu nombre; concede ahora buen éxito a tu siervo, y dale gracia delante de aquel varón. Porque yo servía de copero al rey.
Nehemías oraba teniendo un objetivo, que Dios le concediera exito para hallar gracia delante del rey. Una oración bien enfocada, conforme a la voluntad de Dios con el objetivo principal de hallar gracia delante del Rey, ese debe ser nuestro enfoque. A veces servimos por requisito, porque debo servir para hacer algo o sentirme útil, sirvo a Dios por sentimientos o emociones equivocadas y al final esto no va a rendir fruto, fruto que permanezca, va a ser como en saco roto, no va a darle la gloria a Dios. Antes que nada debo estar a cuentas con Dios y rogarle, pedirle con el corazón que si hemos hallado gracia delante de sus ojos, nos use, nos envie, cumpla su propósito en nuestra vida.
Hoy Nehemías nos enseñó como es una oración que llega al trono de Dios, que es conforme a su voluntad, con un deseo profundo de ser usado por Dios y hallar gracia delante del Rey para hacerlo.
Oremos de esta manera y ser verdaderos instrumentos de Dios para llevar su salvación.
Que tengas un buen fin de semana y no descuidemos la oración constante por Danielito Reyes.
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