HAY RECOMPENSA

^“En aquellos tiempos no hubo paz, ni para el que entraba ni para el que salía, sino muchas aflicciones sobre todos los habitantes de las tierras. Y una gente destruía a otra, y una ciudad a otra ciudad; porque Dios los turbó con toda clase de calamidades. Pero esforzaos vosotros, y no desfallezcan vuestras manos, pues hay recompensa para vuestra obra.” 2 crónicas 15: 5-

Cuando uno lee la Biblia en varias ocasiones siente uno que parece el periódico del día… y es como si uno estuviera leyendo la actualidad nacional e internacional. Estos son indiscutiblemente tiempos en que como en el pasaje no hay paz sino muchas aflicciones, la gente y las ciudades se destruyen entre ellas mismas y estamos turbados de toda clase de calamidades.

Todas éstas cosas han venido como consecuencia del pecado del hombre, de la obstinación de los seres humanos por hacer las cosas alejados de los preceptos de Dios y hacerlo todo a nuestra  manera Es triste en verdad ver como las personas ignoran a Dios y Su hijo Jesucristo y nos hemos conformados a que “no hacerle daño a nadie” es la mejor opción para estar en paz con nuestra condición espiritual.

Al hacer la obra misionera esto es palpable cada día al compartir con tanta gente y por eso es maravilloso ver como de tantos Dios va salvando a algunos, a los que si creen, a los que hacen los ajustes necesarios para ser seguidores del Rey de Reyes abandonando sus pecados y sometiendo sus vidas a lo que dice Dios en Su Palabra, a los que reciben el agua en medio del desierto!!!

Por eso  para tener verdaderamente una vida con propósito, es necesario alinear nuestros pensamientos con los de Dios, porque el mundo seguirá empeorando: menos paz, más aflicciones, destrucción y turbación, pero hay verdadera paz para quienes reciban a quien todo lo creó y el hombre olvidó.  

“La paz os dejo, mi paz os doy; yo no os la doy como el mundo la da. No se turbe vuestro corazón, ni tenga miedo” Juan 14:27

Pero sin duda alguna la mejor parte, no solo es tener la paz de Dios en medio de tanta tormenta cuando nuestro corazón busca al Señor sino Su promesa de que cualquier esfuerzo que hagamos por el avance de Su Reino valdrá la pena, porque a veces nos cansamos y creemos desfallecer, pero hay recompensa!!

Si obramos bien con nuestros hermanos (Mateo 10:42), si somos fieles al Señor (Lucas 19:17), si trabajamos con celo y diligencia en la gran obra de Dios en la tierra (1 Corintios 3:8), si resistimos la tentación (Santiago 1:12), si amamos Su segunda venida 2 Timoteo 4:8), si damos un buen testimonio (Daniel 12:3), si vivimos para El (1 Corintios 3:14)… Habrá recompensa para nuestra obra para la gloria de Dios!! Sigamos adelante, corriendo de tal manera que obtengamos el premio!!