Jesús siempre nos
pone como ejemplo a Su Padre y a Él mismo. Y vuelve y lo hace respecto al tema
del amor, invitándonos muy gentilmente a permanecer en ese ejemplo de amor dado
por ÉL. Nuestro Señor nos invita siempre a dar amor, amor, y más amor.
9Como el Padre me ha amado, así también yo os he amado; permaneced en mi
amor. 10Si guardareis mis mandamientos, permaneceréis en mi amor; así como yo he guardado los
mandamientos de mi Padre, y permanezco en su amor. 11Estas cosas os
he hablado, para que mi gozo
esté en vosotros, y vuestro gozo sea cumplido. 12Este es mi
mandamiento: Que os améis unos a otros, como yo os he amado. 13Nadie tiene mayor amor
que este, que uno ponga su vida por sus amigos. 14Vosotros sois mis
amigos, si hacéis lo que yo os mando. 15Ya no os llamaré siervos,
porque el siervo no sabe lo que hace su señor; pero os he llamado amigos,
porque todas las cosas que oí de mi Padre, os las
he dado a conocer. - Juan 15:9-15
En
este pasaje Jesús vuelve y nos insiste en la importancia de demostrarle nuestro
amor cumpliendo sus mandamientos. Dios nos recuerda permanentemente la
importancia que tiene el que nos amemos unos a otros con ese mismo amor con que
Cristo nos amó, siendo aún capaz de dar su vida por los pecadores y por
aquellos mismos que lo llevaron a la cruz.
El
verdadero amor incluye el estar dispuestos aún a dar nuestra vida por los
amigos. Si realmente queremos considerarnos amigos de Jesús, debemos estar
dispuestos a seguir su ejemplo y a hacer todas las cosas que ÉL nos ha mandado.
En
mi mente siempre debe estar la imagen de lo que Cristo haría en cada
circunstancia, teniendo en cuenta la paciencia, el perdón, la tolerancia, la
misericordia y sobre todas las cosas su AMOR INFINITO por las almas de los
hombres. Qué privilegio tan grande el que Jesús nos da al llamarnos sus amigos,
y al trasmitirnos clara y completamente todos los consejos dados por el
Padre.
Encontramos en este
pasaje tres cosas fundamentales que tienen mucho que ver con la Obediencia al
Señor:
1. Si cumplimos sus mandamientos, por
naturaleza estaremos siempre AMANDO, es la enseñanza de Jesús.
2. Ese AMOR debe ser tan grande como el de
Jesús, dispuestos aún a dar nuestra vida por los demás.
3. El amor de Jesús es tan grande que nos ha
llevado a llamarnos SUS AMIGOS, más que sus siervos.
Jóvenes, por favor
vivamos ese AMOR hacia el prójimo,
no es un juego, tenemos un Dios de AMOR, que nos amó tanto que dio la vida de
Su HIJO por salvarnos de una condenación eterna.
Es impactante ver la forma tan contundente como Dios me muestra cómo
debe ser el AMOR por los demás, dispuesto aún a DAR MI VIDA por ellos.
Que hoy tomemos decisiones firmes, amando
desinteresadamente al prójimo, sintiendo DOLOR por las ALMAS de los hombres y
yendo a predicar el Evangelio sin ningún tipo de reparos a quien lo necesite…
Ojo con esto… Dejar la cobardía y la pereza. Somos privilegiados, Dios nos
considera sus amigos y espera que hagamos nuestra tarea con Santidad,
sabiduría, sinceridad y humildad.
No hay comentarios:
Publicar un comentario