¿SI ES NUESTRO PADRE Y SEÑOR?

Malaquías 1:6-9

“1:6 El hijo honra al padre, y el siervo a su señor. Si, pues, soy yo padre, ¿dónde está mi honra? y si soy señor, ¿dónde está mi temor? dice Jehová de los ejércitos a vosotros, oh sacerdotes, que menospreciáis mi nombre. Y decís: ¿En qué hemos menospreciado tu nombre? 1:7 En que ofrecéis sobre mi altar pan inmundo. Y dijisteis: ¿En qué te hemos deshonrado? En que pensáis que la mesa de Jehová es despreciable. 1:8 Y cuando ofrecéis el animal ciego para el sacrificio, ¿no es malo? Asimismo cuando ofrecéis el cojo o el enfermo, ¿no es malo? Preséntalo, pues, a tu príncipe; ¿acaso se agradará de ti, o le serás acepto? dice Jehová de los ejércitos. 1:9 Ahora, pues, orad por el favor de Dios, para que tenga piedad de nosotros. Pero ¿cómo podéis agradarle, si hacéis estas cosas? dice Jehová de los ejércitos.”

El día de ayer en el servicio dominical este pasaje llamo especialmente mi atención.

Dios me animo a meditar que tan buen hijo y siervo suyo soy. Como podría aun compararme espiritual y físicamente hablando.

En nuestra vida secular somos hijos obedientes, buenos empleados y damos aun mas allá de lo que nos corresponde. Desafortunadamente con Dios algunas veces nos pasa lo que leemos hoy en esta porción de la biblia.

Es muy fácil que de nuestra boca salga un Padre y un Señor, pero de corazón y al momento de actuar, ¿donde está su honra? ¿Dónde su temor?. Dios conoce mejor que nadie nuestros pensamientos y corazones. El sabe que el pecado en nuestra vida es como ese pan inmundo que por nada deberíamos ofrecer a Dios. También podemos entender que lo hemos deshonrado cuando damos a Dios las migajas de nuestra vida, recursos y tiempo cuando en realidad el merece el 100% de nuestra atención y dedicación.

Hoy te invito a que Si en realidad Dios es Tu Padre y Señor, te comportes como tal. No hay nada mejor que ser hijo del creador del universo y servir en el avance de su reino para darle la gloria.

Dios no se merece las migajas, Dios se merece todo de nosotros. El quiere que hagamos parte de la misión más importante sobre esta tierra. EL es el mejor Padre, es el mejor Jefe. En El estamos completos.

Buen día,