martes, 5 de octubre de 2010
EL PEREZOSO Y EL DILIGENTE
Actualmente me encuentro leyendo el libro de Proverbios. El día de hoy jóvenes quiero compartir sobre un tema muy sencillo y práctico a la vez: LA PEREZA Y LA DILIGENCIA.
En el diccionario encontramos las definiciones de estas dos palabras
PEREZA: es la negligencia, tedio o descuido en realizar acciones, movimientos o trabajos. Se le conoce también como gandulería, flojera.
DILIGENCIA: la diligencia es la virtud con la que se combate la pereza.
En la Palabra de Dios encontramos obviamente con mayor claridad y sabiduría que en el diccionario, lo que estas dos actitudes opuestas, generan en el hombre (Proverbios 13:4, 10:4, 12:24, 19:15, 21:5):
- La pereza: Nada alcanza, empobrece, será tributaria, hace caer en profundo sueño y padecerá hambre, lleva a padecer necesidad.
- La diligencia: Será prosperada, enriquece, señoreará, tiende a la abundancia.
En Proverbios 6 Dios nos invita a mirar el ejemplo de la hormiga en cuanto a la diligencia advirtiéndonos acerca de la necesidad de preparar en el verano la comida y nos hace dos preguntas: ¿hasta cuándo has de dormir? ¿cuándo te levantarás de tu sueño?
Examinémonos hoy a nosotros mismos y hagámonos las siguientes preguntas:
- ¿Estamos siendo diligentes o perezosos?
- ¿Somos diligentes para las cosas del mundo, pero perezosos para las cosas de Dios?
- ¿Hasta cuándo has de dormir? ¿Cuándo te levantarás de tu sueño?
Que tengas un día lleno del Señor!!
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