Malos Días Para Gente Buena

Esta mañana queremos compartirte, lo que nuestros jóvenes de transición aprenderán este domingo si el Señor así lo permite. Vamos a estudiar un poco acerca de la vida de Job, y estaremos viendo como hay Malos Días Para Gente Buena.

Cuando sufrimos, nos sentimos rechazados. Inclusive, algunas veces, por Dios. Pero la realidad en muchas ocasiones muestra todo lo contrario. Parte del dolor que sufrimos en nuestra vida indica que Dios en realidad nos está prestando atención. Quiere decir que nos está atrayendo hacia él.

Debemos enfrentarlo: Con demasiada frecuencia nos volvemos a Dios sólo cuando las cosas se ponen tan difíciles que no nos queda ningún otro recurso al cual podamos apelar. Job fue un siervo de Dios que aprendió a acercarse a Dios durante el sufrimiento. Cuando tocó fondo no logró encontrar ayuda en circunstancias, ni en su familia, ni en amigos. Al final, sólo encontró su ayuda en Dios. Y eso marcó una gran diferencia.

Las circunstancias de Job - Capítulo 1 y 2

A Job le llegó el caos a su vida. Fue un ataque del mismo Satanás que Dios permitió porque quería trabajar en la vida de este hombre. Dios deseaba que Job no se fijara en las circunstancias sino en la persona de Dios. Puso a prueba su fe en ÉL. Ninguna de sus pruebas fue a causa de su pecado o algo así. Para él (Job), había sido abandonado por Dios. Aún así nunca maldijo su Nombre.

Muchas veces los momentos difíciles llegan a nuestra vida a causa de nuestro pecado. Asegurémonos que no es a causa del pecado sino que así lo permitió Dios. Nuestra actitud ante estas circunstancias es lo más importante. ¿Cómo reaccionas cuando te encuentras en momentos difíciles y no es precisamente por causa de tu pecado? ¿Que has aprendido? ¿Te has acercado a Dios o te has alejado de El?

Los compañeros de Job

Hablemos de la esposa: verso 9 Cap.2. Las circunstancias que ha pasado no han sido fáciles tampoco y mucho menos para ella como mujer, pues ha perdido a todos su hijos. Ella cuestionaba a Dios y era normal ese cuestionamiento por el dolor que tenía. Ella estaba amargada como muchos reaccionan ante las circunstancias difíciles de la vida. Sin embargo es claro ver que a Job le afectó, pero tomó una decisión: seguir a Dios a pesar de...

Hablemos de los amigos: Verso 12-13 Al principio reaccionaron como se debía, acompañando a su amigo en este momento difícil para su vida, pero cuando decidieron hablar, la cosa no fue tan buena. Capítulo 8: 1-7 - Los amigos sin conocer las circunstancias estaban acusando a Job de un pecado que el nunca cometió. Hablaron más de la cuenta. Hablaron sin tener certeza que era así, aunque era con muy buena intención.

A veces con buena intención tratamos de ayudar a nuestros amigos en sus momentos difíciles, pero cometemos errores como hablar mucho y oír poco. Pensamos que sabemos lo que sienten nuestros amigos en esas circunstancias o tal vez tratamos de remediar su situación a nuestra manera.

La confrontación de Job

Job finalmente dejó de escuchar a sus amigos para escuchar a Dios. Dios habla con Job y le deja saber que no entiende nada, y lo interesante es que le enseña sobre la creación. Job necesitaba entender la perspectiva de Dios. El entiende que su único refugio y consuelo está en Dios y su palabra. 42:1-6. Job entendió que tenía que buscar a Dios quien es fiel en todo momento.

Cuando sufrimos debemos llevar nuestro dolor a Dios, II de Corintios nos habla que nuestro Dios es un Dios consolador. La Biblia nos habla del Espíritu Santo como el Consolador. No deberíamos presuponer que las personas sufren porque son castigadas por Dios. Podría ser que en lugar de eso estén siendo honradas por él al ser consideradas dignas de soportar ese sufrimiento. I de Pedro 4: 12-14.

¿Cómo reaccionas cuando llegan los momentos difíciles? ¿A quien llegas cuando te hayas en esos momentos difíciles? ¿Cómo has salido de esos momentos difíciles? ¿Animado, fortalecido, desanimado, amargado?

“Porque mejor es que padezcáis haciendo el bien, si la voluntad de Dios así lo quiere, que haciendo el mal.”
I de Pedro 3:17

Nos vemos mañana,