LOS VALIENTES DE DAVID

En el libro de Segundo de Samuel en el capitulo 23 a partir del versículo 8, Dios nos habla de los valientes de David, hombres de confianza del rey David, hombres que arriesgaron sus propias vidas por el rey y por su pueblo, pero hay tres hombres que Dios resalta: Adino el eznita que en una ocasión mato como ochocientos hombres, Eleazar hijo de Dodo este se levantó e hirió a los filisteos hasta que su mano se canso, y quedó pegada su mano a la espada y Sama quien defendió un pequeño terreno lleno de lentejas de los filisteos y Jehová dio una gran victoria. Hay otros más en esta selecta lista pero ninguno se podía comparar con estos tres (8-12).

En una ocasión el rey David clamó  por agua del pozo de Belén que estaba bajo una guarnición de los filisteos y estos tres valientes fueron a traerle el agua arriesgando su vida por darle el agua que quería el rey. (14-17)

Pienso que el seguir a Jesús no es fácil y es una decisión que requiere valentía, habrá guarniciones de filisteos atacando un pequeño terreno de lentejas y no con un equipo, solos, si ves la historia no nombra a nadie mas, te dejaran solo y el enemigo ataca con toda, que decides ponerte de pie y hacerle frente o ser como el pueblo de Israel que se fue al ver al ejercito enemigo. No es fácil, se requiere de valentía y pienso mucho en este momento en mis pastores, es de valientes el pastorado, primer blanco del enemigo, más ellos oran y velan por sus ovejas, loas cuidan y defienden como su pequeño terreno de lentejas, están con su espada pegada a su mano y Dios dando gran victoria.

Hoy estos valientes de David me hace ser agradecido con mis pastores que dan la vida por Dios y por su obra y son los hombres de confianza de Dios y por esto Dios los ha puesto donde están.

Te animo a que ores por ellos constantemente: Fabio Alfonso, Favio Andres, Javier Dario, Sergio Mauricio, Diego Fernando, Rodolfo Garrido, Pablo Clark......y muchos más... Una lista de hombres valientes que aceptaron y recibieron el llamado de Dios y lo dan todo por las almas de los hombres.

Un abrazo.