domingo, 5 de febrero de 2012

LA CLAVE PARA UNA BUENA PESCA



“Andando Jesús junto al mar de Galilea, vio a dos hermanos, Simón, llamado Pedro, y Andrés su hermano, que echaban la red en el mar; porque eran pescadores. Y les dijo: Venid en pos de mí, y os haré pescadores de hombres. Ellos entonces, dejando al instante las redes, le siguieron. Pasando allí, vio a otros dos hermanos, Jacobo hijo de Zebedeo, y Juan su hermano, en la barca con Zebedeo su padre, que remendaban sus redes; y los llamó. Y ellos, dejando al instante la barca y a su padre, le siguieron”. Mateo: 4:18-22

En mi cita diaria Dios me regaló este pasaje y me recordaba la fórmula que aprendimos en el discipulado para ser pescadores de hombres: IR EN POS DE JESUCRISTO. Estos 4 discípulos de Jesucristo escuchan su llamado y la forma en que reaccionan es impresionante y me reta a seguirle de la misma manera:

1. Dejaron al instante lo que hacían: decidieron cambiar de prioridades. Ahora dependen de Jesús. No significa que debemos dejar botado todo lo que hacemos, sino darle la verdadera importancia y prioridad a seguir a Jesús, a buscarlo en oración y en su palabra constantemente.

2. Dejaron sus redes: Quizá como pescadores, dejaron lo más valioso para ellos, las redes, ese elemento que los ha acompañado toda su vida ahora no vale nada en sus corazones por la presencia y dirección de Jesús.

3. Dejaron la comodidad: Cuando llama a Jacobo y a Juan deben dejar la comodidad de estar en una barca que podían guiar a donde ellos quisieran, donde podían pescar más lejos de la orilla. Obedecen de inmediato a su llamado y ahora deben caminar.

4. Dejaron un ser querido: esto me hace meditar en un llamado específico de Dios a estos varones, un llamado que implica el dejar un ser querido (en este caso padre) para darle prioridad a Jesús. No es dejar botada a nuestra familia, sino darle el primer lugar a Dios. Si es así, nuestras relaciones con los demás van a marchar bien.

5. Dejaron el temor a un lado: Estos hombres no saben lo que sigue, los milagros tan impresionantes que hará Dios, lo que hará en ellos y en la ciudades vecinas, en las personas que van a conocer, cómo los usará para pescar hombres, aún así decidieron seguirle y confiar en que él cuidaría de ellos y que sería su mejor maestro.

Hoy te animo a que juntos como hermanos en Cristo sigamos a Jesús, que nuestra prioridad siempre sea él y las almas de los hombres y que no importa el tamaño de la red, el modelo de la barca o la influencia de nuestra familia, decidamos seguir a Jesús. La clave para hacer discípulos de Jesús: “Y les dijo: Venid en pos de mí, y os haré pescadores de hombres”.

Abrazos, feliz semana para todos.

No hay comentarios: