domingo, 22 de noviembre de 2009

LA ALABANZA


Salmo 147:7 - Cantad a Jehová con alabanza, Cantad con arpa a nuestro Dios.

Esta mañana tuvimos un tiempo increíble como congregación. Dios estuvo en medio de nosotros. Lo sentí respirándome muy de cerca y confortando mi corazón como solo y solo El lo puede hacer.
Agradezco al Señor por el ministerio de alabanza que nos ha regalado. Doy gracias a nuestro Padre por el corazón con el que la iglesia llegó esta mañana a alabarle a El. Sentí un pedacito de cielo acá en la tierra.
Cantarle al Señor es de las mejores cosas que podemos hacer como creyentes. La mente se renueva, el corazón es consolado, las entrañas se estremecen, la piel se pone de punticas y nuestra fe es fortalecida de una manera inmejorable.
Que bueno es congregarnos para cantar y alabar al Señor, quien es digno de toda la gloria, la honra y la alabanza. Canta en la iglesia, canta en la casa, canta en el carro, canta en la ducha, canta en la cama, canta en el trabajo, canta... canta... canta.
No importa que tu voz no sea le mejor, una alabanza de corazón puede hacer que el universo entero sea conmovido.
Una vida de continúa alabanza al Señor, sin duda alguna es algo insuperable.


Nos vemos mañana,

2 comentarios:

Anónimo dijo...

De acuerdo.

Saludos

Unknown dijo...

si señor (=