NUESTRA FUERZA PROVIENE DE DIOS

Esta semana vamos a revisar un pasaje contenido en el capítulo 84 de los salmos.

SALMOS 84:5-7

“Bienaventurado el hombre que tiene en ti sus fuerzas,

En cuyo corazón están tus caminos.

Atravesando el valle de lágrimas lo cambian en fuente,

Cuando la lluvia llena los estanques.

Irán de poder en poder;

Verán a Dios en Sion.”

Una parte de la Biblia que nos habla del vigor y robustez para actuar aplicando el poder de Dios en nuestra vida; parecería que a veces no tenemos clara que nuestra fuente de poder es el Creador del universo, quien levantó a Jesucristo de los muertos, solamente con él podemos tener la capacidad para romper malos hábitos, actuar bien, vencer la tentación y vivir la nueva vida que quiere que vivamos.

Vamos a corroborar esta con la Palabra de Dios estas afirmaciones.

Después de nuestra salvación dependemos de él, nuestra fuerza proviene de Dios y debe ser motivo de regocijo y capacidad de acción.

Éxodo 15:2

“Jehová es mi fortaleza y mi cántico,

Y ha sido mi salvación.

Este es mi Dios, y lo alabaré;

Dios de mi padre, y lo enalteceré.”

II de Samuel 22:33

“Dios es el que me ciñe de fuerza,

Y quien despeja mi camino;”

Estamos en una guerra espiritual por las almas de los hombres y cada batalla es imposible pelearla alejados de él.

II de Samuel 22:40

“Pues me ceñiste de fuerzas para la pelea;

Has humillado a mis enemigos debajo de mí,”

Salmos 46:1

“Dios es nuestro amparo y fortaleza,

Nuestro pronto auxilio en las tribulaciones.”

Es una fuerza que opera para toda la iglesia.

Salmos 28:8

“Jehová es la fortaleza de su pueblo,

Y el refugio salvador de su ungido.”

Es una fuerza digna de alabanza.

Salmos 88:1

“Cantad con gozo a Dios, fortaleza nuestra;

Al Dios de Jacob aclamad con júbilo.”

Es sinónimo de nuestra comunión con él.

Salmos 89:20-21

“Hallé a David mi siervo;

Lo ungí con mi santa unción.

Mi mano estará siempre con él,

Mi brazo también lo fortalecerá.”

En el caso de los jóvenes tiene un aparte concreto en la Palabra de Dios, él nos conoce y sabe que solamente el podemos fortalecernos.

Isaías 40:30-31

“Los muchachos se fatigan y se cansan, los jóvenes flaquean y caen; pero los que esperan a Jehová tendrán nuevas fuerzas; levantarán alas como las águilas; correrán, y no se cansarán; caminarán, y no se fatigarán.”

Opera las 24 horas del día los siete días de la semana.

Isaías 41:10

“No temas, porque yo estoy contigo; no desmayes, porque yo soy tu Dios que te esfuerzo; siempre te ayudaré, siempre te sustentaré con la diestra de mi justicia.”

Dios nutre nuestro hombre interior.

Efesios 3:14-19

“Por esta causa doblo mis rodillas ante el Padre de nuestro Señor Jesucristo, de quien toma nombre toda familia en los cielos y en la tierra, para que os dé, conforme a las riquezas de su gloria, el ser fortalecidos con poder en el hombre interior por su Espíritu; para que habite Cristo por la fe en vuestros corazones, a fin de que, arraigados y cimentados en amor, seáis plenamente capaces de comprender con todos los santos cuál sea la anchura, la longitud, la profundidad y la altura, y de conocer el amor de Cristo, que excede a todo conocimiento, para que seáis llenos de toda la plenitud de Dios.”

Jóvenes, como leíamos en Isaías 40:30-31, Dios sabe que somos seres frágiles, que sentimos debilidad, sin embargo, nos hace una promesa, hagámosla efectiva en nuestras vidas, conectémonos con él, recarguemos nuestra energía y trabajemos sin cansancio para el avance de su obra.

Nos vemos en quince días, un saludo muy especial a las jóvenes que viajan al Retiro de Damas, que Dios bendiga ese encuentro.

MAC