En apenas unas horas (¡5 exactamente!) daremos por finalizado si el
Señor lo permite el año 2015. Un año lleno de razones en lo más profundo de
nuestro ser para agradecer a nuestro buen Señor por cada cosa vivida en el
transcurso del mismo. En lo personal doy gracias al Señor por la vida de cada
uno de ustedes; sus vidas son nuestra razón de ser y no cambiamos por nada en
el mundo el ministerio precioso que recibimos del Señor Jesús, en las vidas de todos
y cada uno de nuestros jóvenes.
Esta noche tan solo animarles a permanecer fieles a Aquel que fue, es
y sigue siendo fiel a cada uno de nosotros. A permitir que en este año que
comienza Jesús sea el Señor en cada área de nuestra vida. Que como ministerio
seamos ejemplares en toda nuestra manera de vivir y de esa manera nos
convirtamos en ese canal de bendición para que muchos a nuestro alrededor
conozcan al único y verdadero Dios.
Que temamos al Señor y de esa manera nuestra sabiduría crezca, que no
despreciemos la sabiduría y la enseñanza que recibiremos de la Palabra de Dios.
Que oigamos la instrucción de nuestros padres y no despreciemos la dirección de nuestra madre.
Que no consintamos en el engaño de los pecadores, que apartemos
nuestros pies de sus veredas. Que guardemos nuestra vida de la codicia la cual
quita la vida de sus poseedores. Que recibamos la palabra de Dios y guardemos
sus mandamientos; que nuestro oído esté atento a la sabiduría, que nuestro
corazón se incline a la prudencia, que la busquemos como a la plata y la
escudriñemos como a tesoros para entonces entender el temor de Jehová y hallar
el conocimiento de Dios.
Que pasen un buen tiempo en familia y disfruten sanamente de este
comienzo del 2016 de la mano de nuestro amado Señor.
Los amamos entrañablemente!
Javier,
Javi... Muchas gracias por cuidar tan sabia y amorosamente de nosotros. Te amamos.
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